Según informa EL ESPAÑOL, romper cosas no siempre es fácil, especialmente si lo quieres hacer sin dejar los alrededores hechos unos zorros. Un buen ejemplo es la demolición de este silo de 54 metros de altura en la localidad danesa de Vordingborg, en isla danesa de Selandia, en el estrecho que separa la Dinamarca continental de Suecia. El incidente, por fortuna, no causó heridos.
Como la mayoría de los derribos, el silo debía caer en vertical, sin embargo los responsables parece que no calcularon bien los efectos de los desperfectos de la estructura, que acabó inclinándose, y cayendo sobre la biblioteca y centro cultural hay hay sobre el desafortunado silo.
"No nos imaginábamos que saldría tan mal", explicó el responsable de la demolición, Kenneth Wegge a la televisión danesa TV2. "Todavía no sabemos qué ocurrió, estamos investigando".
El ayuntamiento de la ciudad publicó unas imágenes de cómo había quedado la biblioteca y confirmando que nadie había resultado herido. El incidente destrozó las oficinas situadas en la esquina sobre la que cayó el silo, por suerte el resto del local está más o menos intacto. "La biblioteca está llena de restos de vidrio, cascotes, polvo y grava que requieren una limpieza extensa". Además, al haber quedado expuestos al interior, es posible que algunos libros hayan quedado afectados por la humedad.
Los trabajos de restauración empezarán este mismo lunes, aunque no se ha facilitado una fecha ni previsión de cuándo el centro puede volver a estar operativo.
La demolición del silo fue aprobada en 2017. En su lugar se construirá un edificio que combinará las funciones de hotel y vivienda, además de tener espacios de trabajo para profesionales liberales. De momento no ha comenzado su vida con el mejor de los pies.
Fuente: EL ESPAÑOL
