Según recoge Informativos Telecinco, la variante Delta estará detrás de la sexta ola de contagios de la pandemia de covid-19 que ya vislumbran los expertos para el próximo otoño. Los mayores transmisores de la enfermedad serán los menores de edad a los que aún no se ha podido vacunar por falta de evidencia científica sobre el funcionamientos de las vacunas en sus organismos. Mientras llega la decisión de las autoridades sanitarias las propuestas pasan por mantener la ventilación en los colegios e institutos y seguir con medidas como la mascarilla y la distancia social.
Rafael Bengoa, experto en Salud Pública y exdirectivo de la OMS, lo tiene claro. En una entrevista en El Programa del Verano de Telecinco, el experto se ha mostrado convencidos de que "el otoño va a ser complicado, los brotes que tendremos después de controlar la quinta ola serán brotes de delta, que habrá que controlar de forma muy firme".
Y cómo será ese control. Según Bengoa, habrá que "seguir creando las burbujas y casi exagerando la ventilación que necesitamos en los colegios durante el otoño".
Y eso porque ahora, más que los jóvenes, serán los niños los vectores de la variante delta del coronavirus y con ellos la enfermedad seguirá circulando por el país aunque enfrente se encontrará a una población masivamente vacunada.
Todo dependerá de las mutaciones del virus
El diario El País también se ha preocupado por la posibilidad de una sexta ola de la pandemia. Los expertos consultados coinciden en que todo dependerá de las mutaciones o variantes que sufra el SARS-CoV-2 durante este tiempo.
El consenso entre los científicos es que la presión de variante delta se topará con una población vacunada y que su incidencia será cada ve menor hasta convertirse en un proceso vírico similar a la gripe estacional. Las dudas en este punto será si hará falta una vacuna de recuerdo cada año o simplemente, una tercera dosis.
El problema surge cuando se introduce una nueva variante más agresiva y peligrosa de la covid-19 capaz de sortear la inmunización de los vacunados contra la pandemia, o agravar los síntomas de los nuevos contagiados, una combinación muy peligrosa que podría otrz ve a nuestro sistema sanitario al borde del colapso.
Los niños serán los que propaguen la sexta ola
Haya o no sexta ola, los expertos coinciden en varios puntos. El primero es la necesidad de desescalar de forma progresiva esta quinta ola para no caer en los errores de las anteriores en las que pasamos de confinamientos estrictos a una situación de falta de medidas contra los contagios.
También coinciden en la necesidad de avanzar hasta lograr la inmunización casi total de la población para minimizar los riesgos de variantes capaces de sobrepasar las barreras inmunológicas de las actuales vacunas.
Y finalmente, una doble cuestión: la pandemia seguirá su proceso de transmisión por la población infantil y la persistencia de los síntomas de la covid en la población joven, mayoritariamente asintomática a la enfermedad pero no a sus consecuencias en el organismo.
