Tres geólogos de 28, 29 y 31 años de edad han muerto este jueves debido a un desprendimiento en un galerÃa de una mina de potasa que la empresa ICL Iberia explota en Súria (Barcelona), que los ha dejado atrapados a unos 900 metros de profundidad.
El accidente laboral, cuyas causas se están investigando, ha ocurrido poco antes de las 9.00 horas, al desprenderse parte de una galerÃa de las minas de Súria, explotadas por la empresa ILC, que la Generalitat habÃa inspeccionado hace apenas tres semanas, sin que se detectara ninguna irregularidad.
Los fallecidos son un geólogo de mecánica de rocas, vecino de Sant Joan de Vilatorrada (Barcelona), que llevaba cuatro años trabajando en ICL, asà como dos estudiantes de máster -uno colombiano y otro de Alicante- de la Escuela Politécnica Superior de IngenierÃa de Manresa (EPSEM), dependiente de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), uno de los cuales apenas llevaba nueve dÃas trabajando en la mina.
Los fallecidos tenÃan 28, 29 y 31 años de edad, según han detallado a EFE fuentes próximas al caso.
Uno de los fallecidos que cursaba el máster habÃa iniciado recientemente unas prácticas en la compañÃa ICL Iberia en el marco de un convenio de cooperación educativa con esta universidad, mientras que otro era un estudiante del mismo máster y tenÃa contrato laboral con la empresa.
La tercera de las vÃctimas también era geólogo, estaba contratado por la empresa que gestiona la mina, ICL Iberia, y era estudiante de doctorado de geologÃa de la Facultad de Ciencias de la Tierra de la Universidad de Barcelona.
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha confirmado hacia las 18.00 horas la muerte de los tres trabajadores y ha trasladado el pésame del Govern a las familias de las vÃctimas, a sus compañeros y a la empresa minera y su entorno, al tiempo que ha agradecido la labor de los equipos de emergencia que han participado en las complejas tareas para estabilizar la galerÃa y poder recuperar e identificar los cadáveres.
Una vez identificados los cadáveres, Aragonès ha indicado que se abrirá una investigación judicial para aclarar las causas de este "trágico accidente", con la colaboración de los Mossos d'Esquadra y el apoyo técnico de la Subdirección General de Minas de la Generalitat.
Asimismo, la ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, ha expresado la "consternación" del Gobierno por el accidente de Súria y ha trasladado la solidaridad a las familias de las vÃctimas.
Efectivos de emergencias especializados de los Bomberos de la Generalitat y de los Mossos d'Esquadra han trabajado a lo largo de todo el dÃa para rescatar los cadáveres, unas labores complejas dada la inestabilidad de la zona donde ha sucedido el accidente y la necesidad de asegurar los accesos para permitir el paso de los equipos de rescate.
Las causas del accidente deberán ser investigadas por el juzgado de Manresa (Barcelona), que esta tarde ha enviado a una comitiva judicial para el levantamiento de los cadáveres, aunque fuentes sindicales apuntan a que podrÃa deberse a un desprendimiento de liso -cara plana y extensa de roca-, que habitualmente se afianza mediante la colocación de anclajes y malla metálica, en lo que se conoce como técnica de bulonaje.
También el Departamento de Empresa y Trabajo ha enviado a dos inspectores de la subdirección de Minas para examinar el lugar del accidente e indagar las causas del mismo: de entrada, el conseller Roger Torrent ha explicado desde Súria que en la revisión de la mina efectuada hace tres semanas no se detectó "ninguna situación" que aconsejara abrir expediente a ILC por fallos de seguridad.
Por su parte, la empresa ILC Iberia, más conocida como Iberpotash y que históricamente ha explotado las minas de potasa de la comarca barcelonesa del Bages, ha lamentado "profundamente" el accidente mortal y ha detallado que "en estos momentos se están investigando las causas del accidente junto con las autoridades competentes".
En un escueto comunicado, la filial de la multinacional israelà ICL no ofrece ninguna hipótesis acerca de cuáles pueden haber sido las causas de esta tragedia. En principio, la mina quedará cerrada hasta que se oficie el funeral de las tres vÃctimas.
Hace diez años que no ocurrÃa un accidente laboral mortal en la mina de Súria: en 2013, en una tragedia similar, fallecieron dos trabajadores al desprenderse el techo de la galerÃa de una mina, mientras realizaban tareas de mantenimiento en una máquina de extracción.
Iberpotash contaba con otra mina en Vilafruns (Barcelona) que decidió cerrar definitivamente por "motivos económicos" en julio de 2020, dos meses después de que sendos accidentes laborales se cobraran a vida de dos trabajadores de una empresa subcontratada que operaba en el yacimiento.
Súria, una población eminentemente minera, ha amanecido hoy conmocionada por la muerte de los geólogos: no en vano, el grueso de los vecinos trabaja o ha trabajado en el yacimiento o cuenta con algún familiar que lo ha hecho.
De hecho, los compañeros de los trabajadores fallecidos en la mina de Súria no ocultaban lo "tocados" que se sentÃan por la muerte de sus compañeros: "nos conocemos todos porque comemos juntos todos los dÃas. Me podrÃa haber pasado a mÃ", ha declarado uno de ellos, compungido.
La empresa no retomará la actividad hasta que se entierren a los tres geólogos, como es tradición en la mina en este tipos de sucesos.