El Ayuntamiento de Talavera de la Reina ha aprobado de manera definitiva el presupuesto municipal para 2018, que asciende a algo más de 63,4 millones de euros, lo que supone dos millones más que el del año pasado.
La aprobación ha contado con el voto favorable del Grupo Municipal del PP y de los dos concejales no adscritos que fueron expulsados de Ciudadanos, y que ahora apoyan al Gobierno local, mientras que PSOE, Ganemos Talavera y otros dos ediles más sin adscripción han votado en contra.
El concejal de Economía y Hacienda, Arturo Castillo, ha asegurado que se trata de un presupuesto "realista" en el que se aumenta un 77 % las inversiones con respecto a 2017, hasta alcanzar los 2,4 millones de euros.
Castillo ha apuntado, además, que se mantiene el medio millón de euros del Fondo de Emergencia Social, mientras que las partidas para la Concejalía de Servicios Sociales se elevan a 4,5 millones de euros porque "creemos que debemos ayudar a los talaveranos que peor lo están pasando", ha precisado.
Por su parte, el portavoz del PSOE, José Gutiérrez, ha señalado que el rechazo de la oposición al presupuesto es una muestra de que el Gobierno local "está en contra de todo el mundo" y, al mismo tiempo, ha comentado que "es la muestra más evidente de que está KO políticamente".
Gutiérrez ha subrayado que las cuentas del Ayuntamiento deberían estar preparadas para "el nuevo aire que vendrá este año a Talavera" en inversiones procedentes de las distintas administraciones.
Al respecto, ha indicado que se debería haber incorporado una partida para financiar la segunda fase del polígono de Torrehierro para que las grandes empresas de logística interesadas en instalarse en la ciudad cuenten con suelo industrial preparado.
Mientras, la viceportavoz de Ganemos, Sonsoles Arnao, ha calificado de "mero trámite" el pleno de hoy por la mayoría absoluta del Ejecutivo local y ha aseverado que el presupuesto "no está a la altura de los problemas de la ciudad".
Igualmente, Arnao ha reprochado al Gobierno su "nula voluntad de diálogo" a la hora de elaborar las cuentas locales porque, a su juicio, "no es su estado natural y es algo que les incomoda".
En cuanto al concejal no adscrito Juan Pedro Ayuso, también ha declarado que el Gobierno no ha tenido en cuenta la participación de las asociaciones de vecinos, los sindicatos y la oposición.
Ante las críticas de la oposición, Arturo Castillo ha manifestado que las alegaciones presentadas por el PSOE "no dicen con qué se van a financiar y son una carta a los Reyes Magos", mientras que a Ganemos le ha reprochado no haber aportado ninguna propuesta.
Respecto a las impulsadas por la Federación Empresarial Toledana (Fedeto), CCOO y UGT, el concejal ha aseverado que "no se ha planteado por el conducto reglamentario".
Finalmente, sobre las de la Federación de Asociaciones de Vecinos 'Vegas del Tajo' ha comentado que "no se pueden aceptar por responsabilidad política".
