Castilla-La Mancha cuenta con una población estimada de lince ibérico de más de 582 ejemplares, contando con los 223 cachorros nacidos en 2022, ha destacado este martes en Polán (Toledo) el consejero regional de Desarrollo Sostenible, José Luis Escudero.
El consejero ha facilitado estas cifras durante la suelta en la finca El Borril, ubicada en Polán, de una pareja de linces ibéricos nacidos e 2022, que tienen actualmente un año de edad: un macho llamado ‘Tempo’, que procede del Centro Nacional de Reproducción de Lince Ibérico de Silves (Portugal) y Tesla, una hembra nacida en el Centro de Cría en Cautividad de La Olivilla (Jaén), dependiente de la Junta de Andalucía.
Estos dos linces liberados este martes en el área de reintroducción de los Montes de Toledo, y un tercero que se liberará en las próximas semanas en el área de reintroducción de Sierra Morena oriental, serán los únicos ejemplares que se liberarán en 2023 en Castilla-La Mancha dentro del programa europeo ‘Life Lynx Connect’, ha informado en una nota de prensa la Consejería de Desarrollo Sostenible.
Escudero ha destacado que “la favorable evolución del proyecto de reintroducción ha permitido poner los cimientos del proceso de recuperación del lince ibérico en la región”.
El titular de Desarrollo Sostenible ha valorado que cuando han transcurrido ocho años desde que fueron liberados los primeros linces ibéricos en el marco del proyecto ‘Life Iberlince’, los esfuerzos que se han hecho en Castilla-La Mancha durante este periodo han permitido el establecimiento de tres áreas de presencia estable de este felino amenazado.
Con la pareja de linces que se han soltado este martes ya se han liberado en Castilla-La Mancha más de 118 ejemplares desde 2014, ha indicado Escudero, que ha añadido que en esta nueva etapa, enmarcada en el proyecto ‘Lynx Connect’, se ha fijado como reto consolidar las poblaciones existentes, conectarlas entre sí y disminuir las amenazas de la especie.
En este sentido, ha dicho que durante 2022 nacieron en libertad 223 cachorros de la especie en la comunidad autónoma, de los que 107 lo hicieron en los Montes de Toledo, lo que según Escudero “marca un nuevo hito histórico en la conservación de la especie”.
Asimismo, ha señalado que el seguimiento de agentes medioambientales, técnicos de la Consejería de Desarrollo Sostenible y la empresa pública Geacam, con la colaboración del personal de las fincas, ha permitido detectar un total de 84 camadas silvestres con (al menos) esos 223 cachorros, 107 de ellos en los Montes de Toledo, 65 en Sierra Morena Oriental, 47 en Sierra Morena occidental y cuatro en la provincia de Albacete.
En la actualidad se encuentran asentadas un total de 112 hembras territoriales: 53 en Montes de Toledo, 37 en Sierra Morena Oriental, 21 en Sierra Morena Occidental y una en la provincia de Albacete, mientras que la población total en Castilla-La Mancha es de 359 individuos mayores de un año (adultos y juveniles) y los 223 cachorros nacidos en 2022, situando las cifras por encima de los 582 ejemplares.
Al respecto, Escudero ha maniestado: “Como Gobierno regional hemos cumplido con la recuperación de una especie propia de nuestro territorio y que estaba extinta y hemos cumplido con los objetivos que se marcaron en el año 2003, con la aprobación del Plan de Recuperación del lince ibérico y se declaraban zonas sensibles las áreas críticas para la supervivencia de la especie en la región”.
Y ha añadido que también ha cumplido “con los objetivos marcados por los diferentes proyectos ‘Life’ que se han ido sucediendo para la recuperación de esta especie: Priorimancha, Iberlince y Life Lynx Connect”.
