El cocinero toledano Pepe Rodríguez ha ensalzado este jueves, durante el pregón del Domund en la Catedral de Toledo, a los 7.200 misioneros que España tiene repartidos por el mundo, a quienes se ha dirigido afirmando "os necesitamos, necesitamos vuestro ejemplo y saber que sois nuestras manos allá lejos, donde nosotros no llegamos" y , por esta razón, "merecéis no una, sino varias 'estrellas'" .
Este guiño al mundo de la cocina no ha sido el único que el chef de Illescas ha hecho durante su alocución en el templo toledano, mientras anunciaba la celebración el próximo domingo de la Jornada Mundial de las Misiones, con un discurso plagado de citas del Papa Francisco y alguna de Santa Teresa de Calcuta, que decía: "en la cocina, entre los pucheros anda el Señor".
En la misma línea de las palabras de la santa, Rodríguez ha defendido que "la comida es reunión, fraternidad, cercanía, y todo eso es evangelización" y ha agregado que no le extraña que una de las películas favoritas del papa Francisco sea 'El festín de Babette', que gira en torno a un banquete, "porque la comida compartida une; comer es celebrar, y los cristianos, que no somos tontos, nos reunimos en torno a la mejor Comida en el banquete de la eucaristía".
También ha subrayado el cocinero que, en el mundo en que él trabaja, "como en todos los ámbitos, los valores son fundamentales" y ha puesto como ejemplo que, en un equipo de cocinas, "nada puede funcionar igual sin esa aportación de cada uno, que hace que, como dice el Papa Francisco, el todo sea más que las partes, y también más que la mera suma de ellas"'.
A juicio del cocinero, las cualidades que se requieren en una cocina las vemos "al cuadrado" en los misioneros: "la importancia de escuchar, de aportar, de estar aprendiendo siempre; la importancia del sacrificio, de volverlo a intentar, de trabajar sin tirar la toalla; la importancia de superarnos y de ayudar a que otros se superen y nos superen, sin generar dependencias".
Pero, de un modo especial, ha recalcado Rodríguez, en los misioneros "vemos la importancia de la entrega a lo que apasiona", y los misioneros, como dice también el Papa, "sienten una pasión por Jesús y una pasión por su pueblo. Por eso, no dan el 'excedente' a quien lo necesita: lo dan todo, se dan ellos mismos".
Además del compañerismo, el chef ha resaltado que, en un equipo de cocinas, es esencial el liderazgo y ha agregado que "en los misioneros y misioneras descubrimos un liderazgo al que no estamos acostumbrados en nuestra sociedad: el liderazgo del servicio".
Otros dos rasgos más de los misioneros en los que se ha fijado el cocinero y que ha considerado como "una interpelación para todos nosotros", son el "valor del ejemplo" y el "contacto con la realidad".
Acerca del primero ha significado que, "en lugar de leer una receta en voz alta, los misioneros, simplemente, cocinan en medio de todos" y, "sin pretenderlo ni darse aires de nada, ofrecen con su vida una lección magistral y, lo más sorprendente, asequible para todos".
En cuanto al contacto con la realidad, ha comentado que los misioneros "no hablan de oídas ni elaboran teorías: si en el mundo hay fango, ese fango que muchas veces no queremos ver y que se llama falta de sentido, pobreza, incultura, hambre... ellos se manchan hasta las cejas, y si hay motivos de alegría, lo celebran con todos", ha enfatizado.
Llegado a este punto, el chef toledano ha recordado que España tiene cerca de 7.200 misioneros repartidos por el mundo, de los cuales casi 120 han salido de la provincia de Toledo y su Diócesis, y "entre nosotros, sensibilizándonos y movilizándonos para que no nos quedemos cruzados de brazos, hay unos 3.500 misioneros españoles más, regresados por distintas razones", ha agregado.
También ha resaltado que España es el país con más misioneros del mundo y el segundo, después de Estados Unidos, que más aporta económicamente al Domund para ayudar a la labor misionera por todo el planeta: casi 13 millones de euros en 2020.
Y, para concluir, dirigiéndose a todos los misioneros, ha dicho: "Os diría que merecéis no una, sino varias 'estrellas', pero, como sé que no buscáis reconocimientos, os voy a decir algo que os gustará más: ¡os queremos en nuestro equipo!. Así que, misioneros, ¡a cocinas! Y todos nosotros, para ayudaros, ¡al Domund!".
