Familia del cazador de Belvís recurrirá la sentencia de la Audiencia Provincial

La familia de Antonio Fernández, el cazador de Belvís de la Jara (Toledo) que fue asesinado de un disparo en el cráneo en 2013, recurrirá la sentencia de la Audiencia de Toledo que ha condenado a los dos acusados del crimen

El Jurado declara culpables a los dos acusados de asesinar al cazador de Belvís de la Jara (Toledo)
photo_camera En la imagen de archivo los acusados durante la celebración del juicio

La familia de Antonio Fernández, el cazador de Belvís de la Jara (Toledo) que fue asesinado de un disparo en el cráneo en 2013, recurrirá la sentencia de la Audiencia de Toledo que ha condenado a los dos acusados del crimen, Rufino González 'El Conejo' y Flores Alba, a 24 años y ocho meses y a 18 años de prisión, respectivamente.

Así se lo ha confirmado a Efe el abogado de la familia, Jesús Lázaro, quien ha explicado que los familiares recurrirán la determinación de las penas porque, en su opinión, "podrían ser más ajustadas".

De este modo, pedirán más años de cárcel para los acusados a través de un recurso que, según Lázaro, será "muy técnico" porque se referirá "a la fijación de la cuantía del tiempo de las penas".

La sentencia de la Audiencia Provincial, a la que ha tenido acceso Efe, detalla que a Rufino González, a quien se le considera autor material del disparo, se le imponen 19 años de prisión por un delito de asesinato, 4 años más por un delito robo con violencia y un año y ocho meses más por tenencia ilícita de armas.

A Flores Alba, la Audiencia Provincial le condena a 15 años de cárcel por el delito de asesinato, 2 años de cárcel por robo con violencia y un año más por un delito de tenencia ilícita de armas.

Ambos acusados también deberán indemnizar conjunta y solidariamente con 120.000 euros a la viuda del cazador y con 60.000 euros más a cada uno de los dos hijos del fallecido.

La sentencia considera probado que los dos acusados y el fallecido quedaron para cazar el 30 de septiembre de 2013 y que, tras encontrarse en el punto acordado y caminar un tramo a pie, Rufino González "empuñó y apretó el gatillo de la pistola", sin que la víctima tuviera posibilidad de advertir la inminencia del ataque, dado que estaba de espaldas a su agresor.

También apunta que la muerte de Antonio Fernández fue ideada por Rufino González, con el propósito de apoderarse del rifle, visores y restantes objetos que portaba, mientras que Flores Alba "prestó su anuencia" y era "consciente de lo que iba a ocurrir esa tarde".

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