La Diputación de Toledo destina 250.000 euros a la mejora de 29 edificios religiosos

La presidenta de la Diputación, Concepción Cedillo, y el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro
El convenio refuerza la cooperación entre ambas instituciones, garantiza la conservación del patrimonio cultural y facilita el uso de las parroquias e iglesias como centros de encuentro y cohesión social.

La Diputación de Toledo y el Arzobispado de Toledo han firmado un convenio de colaboración para la reparación y mejora de 29 edificios religiosos en distintos municipios de la provincia.

El acuerdo, suscrito por la presidenta de la Diputación, Concepción Cedillo, y el Arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves, establece la aportación de 250.000 euros por parte de la Diputación para financiar actuaciones que van desde la reparación de cubiertas y campanarios hasta la renovación de instalaciones eléctricas y mobiliario, garantizando así la conservación del patrimonio religioso y su uso como espacios de encuentro y cohesión social para los fieles.

El presupuesto de cada una de las actuaciones se articula mediante un sistema de financiación compartida, de modo que, además de los 250.000 euros aportados por la Diputación de Toledo, cada proyecto se completa con un tercio del coste asumido por la parroquia objeto de la intervención y otro tercio financiado por el Arzobispado de Toledo, según ha trasladado la Institución provincial en una nota de prensa.

Las actuaciones incluyen la reparación de cubiertas, torres, muros y campanarios, así como la renovación de instalaciones eléctricas, mobiliario y trabajos de pintura, preservando el valor histórico, artístico y cultural de cada edificio.

Concepción Cedillo ha destacado que este convenio no solo responde a la conservación del patrimonio, sino también a la importancia de mantener vivos los espacios religiosos como centros de encuentro, identidad y cohesión social en los municipios.

Asimismo, ha subrayado que la colaboración con el Arzobispado permite aunar esfuerzos y garantizar una gestión más eficiente de los recursos, asegurando que cada intervención se realice con la máxima calidad y beneficio para la comunidad.

Francisco Cerro ha señalado que este apoyo es fundamental para que las parroquias y ermitas puedan continuar prestando servicio a los fieles y mantener su relevancia histórica y cultural, contribuyendo al enriquecimiento del patrimonio religioso de la provincia y a su legado para futuras generaciones.