'Claveles', un canto a la esperanza con los 50 años de 'democracias ibéricas' de fondo

'Claveles', un canto a la esperanza con los 50 años de 'democracias ibéricas' de fondo
Silvia Marsó y Abel Folk condenan los abusos dentro del teatro y esperan que se "erradique" esta "lacra universal"

El Teatro de Rojas de Toledo acoge este jueves, 25 de abril, y este viernes, 26 de abril, el estreno absoluto de 'Claveles' de Emma Riverola, una obra caracterizada por la "esperanza" que protagonizan Silvia Marsó y Abel Folk, que es también su director.

Ambos han asistido a la rueda de prensa de presentación de 'Claveles' junto a la concejal de Cultura del Ayuntamiento de Toledo, Ana Pérez, que ha destacado que un estreno nacional como el de 'Claveles' es "muy importante" para la ciudad, teniendo en cuenta que quiere ser Capital Europea de la Cultura en 2031.

De su lado, Abel Folk ha indicado que "el fenómeno curioso" de que este espectáculo se estrene ahora, coincidiendo con la conmemoración de la Revolución de los Claveles de Portugal, es porque este es el punto de partida de la historia que cuenta la obra sobre los personajes de Javier y Violeta.

"Estrenar en esta fecha y aquí es un privilegio extraordinario y estamos inmensamente agradecidos a Toledo por acogernos", ha apuntado, para agregar que tras un breve parón 'Claveles' se representará por toda España y estará unos dos años "viva", algo "bastante extraordinario" dentro del panorama de producción del país.

Ha añadido que el texto de Emma Riverola habla de tres personajes que estudiaban en la misma universidad y pertenecían al mismo partido político en España y se fueron a Lisboa a vivir la Revolución de Los Claveles para volver "cargados de ideología, de estímulo y de energía", cuando a su llegada un individuo del partido intenta abusar de Violeta.

Un hecho que desencadena la ruptura de estos tres personajes y Ramón y Violeta acaban casándose mientras que Javier se separa y con el tiempo acaba siendo presidente del Gobierno. Siendo el punto de partida de la obra la muerte al cabo de 40 años de Ramón y el reencuentro entre Javier y Violeta tras acudir este primero a darla el pésame.

"Eso me hace pensar que la vida está llena de encrucijadas, de momentos, de decisiones, algunas de ellas muy banales, que condicionan nuestra vida para siempre", ha manifestado Folk, que ha añadido que son dos actores en esta función pero hay tres personajes y el tercero "es fundamental" para la función.

Finalmente, ha señalado que si hay una palabra con la que se tiene que definir la función es esperanza. "Si tuviéramos que hacer un diagnóstico de uno de los problemas que tiene nuestra generación es que no creemos que es posible un mundo mejor y aunque no es una función que quiera dar respuestas sí que quiere hacerse preguntas como si creemos realmente en un futuro mejor".

"UNA VÍCTIMA CLARA"

De su lado, Silvia Marsó ha destacado que su personaje se vio enfrentada a una situación que le cambió la vida pero también fue "una víctima clara" de ese patriarcado que no permitía que las mujeres tuvieran su lugar. "Se tuvo que refugiar en los ensayos filosóficos, porque es filósofa, para plasmar todo eso que se podía criticar del comportamiento tanto político como social de nuestro país".

Ha definido así a su personaje como una mujer muy intelectual pero también "dura" y "un poco antipática" porque no da lugar en su manera de comportarse a la debilidad. "Creo que ella, a raíz de lo que le pasó, ha adoptado una postura férrea, directa, intransigente, pero absolutamente honesta y es una persona que no es nada hipócrita, no es nada convencional, no es nada diplomática".

Una dureza que, ha confesado, como actriz le "cuesta" porque ella es "todo lo contrario". "Sí que soy honesta, pero soy una persona que siempre tengo la empatía hacia el otro y la intención de no causar incomodidad en el que tengo delante, y ella no".

Es por ello por lo que ha calificado al personaje de Violeta como "difícil" y ha asegurado que le está "costando" pero ha añadido que es un reto también. "A mí siempre me han gustado los retos, hacer el más difícil todavía, y además estar frente a frente con Abel Folk, un gran actor al que siempre he admirado, pues me suponía un reto también, y lo estoy disfrutando".

Para terminar, ha subrayado que su personaje tiene "mucho que decir" respecto a los derechos de la mujer y a la posición de la mujer en la sociedad, pero también para reflexionar sobre la vida y cómo en un momento determinado "te puedes dar cuenta de que todo ha sido un error y que, a veces, los malos entendidos y la falta de diálogo provocan que vivamos engañados".

ABUSOS DENTRO DEL TEATRO

En otro orden, los actores han condenado este miércoles cualquier tipo de abuso que se produzca dentro de la industrial de teatro y han esperado que esta "lacra universal" se "erradique inmediatamente".

Ambos se han pronunciado así a preguntas de los medios por el caso del director de teatro Ramón Paso y los presuntos abusos sexuales que habría cometido contra varias mujeres entre 2018 y 2023.

En concreto, Folk ha considerado "como tremendo" que haya habido abuso sexual en su sector pero ha añadido que ha habido también "mucho abuso de poder". "Ha habido abusos de muchos tipos en esta industria nuestra, porque es muy jerárquica: el productor es Dios, el director es Nuestro Señor y hay que tratarles con reverencia".

"Cada vez estamos suavizando más esas cosas, pero los que tenemos ya una edad y hemos vivido trabajar con don Pepe Tamayo, a quien yo le tenía un gran afecto pero era un tipo muy 'heavy', con lo cual las relaciones en esa compañía eran tremendamente jerárquicas y muy injustas en esa época", ha manifestado.

Es por ello por lo que ha señalado que hay una herencia en este sentido en el teatro que "es repugnante" por lo que desea y espera que se "erradique inmediatamente" pese a que teme que va a seguir ocurriendo en algunos casos y hay que estar "muy alerta".

No obstante, ha apuntado que en este trabajo "es muy fácil que eso pase" porque las relaciones son "muy intensas" y la dependencia --emocional y laboral-- de unos con otros "es absoluta". "Yo estoy muy triste con todo lo que está saliendo y espero de verdad que seamos capaces de erradicarlo rápido".

Finalmente, Folk ha dicho que "sería terrible" identificar al sector con los abusos. "Es absolutamente minoritario, lo que pasa es que es perfecto que se le dé visibilidad a esa minoría que ocurre para que no exista", ha concluido.

De su lado,  Marsó ha considerado este asunto "una lacra universal" destacando que este movimiento viene de los Estados Unidos y ha hecho que algunas carreras "se desvirtuaran". Así, ha puesto como ejemplo el de una amiga periodista que dejó la carrera de actriz y ahora está contratada en televisión porque "no podía soportar el acoso que sufría a diario por parte de directores, productores y directores de casting".

"Yo no tuve que sufrirlo de joven porque a los 18 años ya me hice 'popular' y teniendo popularidad o a los medios de comunicación cercanos, no se atreven tanto. Es una protección. Entonces yo no lo viví, pero sí que lo he visto en compañeras mías, en gente que a lo mejor no tenían esa popularidad", ha señalado.

Es por ello por lo que ha afirmado que "está muy bien" que "todos" defiendan el 'Mee Too' "y que no permitamos, bajo ningún concepto, que se siga produciendo. Y en ello estamos".

También ha destacado que en la Unión de Actores hay un departamento para asistir a cualquier actor o actriz que sea víctima de un acoso sexual o de abuso de poder y que está abierto a todos los actores de España, no solamente a los socios. "Creemos que es algo que afecta a nuestro colectivo y que se debe erradicar".