La Policía Nacional ha detenido en Talavera de la Reina (Toledo) a cuatro personas como presuntas responsables de un delito de tráfico de drogas al detectar que, a pesar de las medidas establecidas durante el estado de alarma, distribuían cocaína al "menudeo" desde tres domicilios situados en la ciudad.
Fueron los mismos ciudadanos quienes detectaron que se estaba produciendo una situación anormal y alertaron a la Policía Nacional a través del 091, comunicando que en los alrededores de sus viviendas era habitual observar a personas ajenas al lugar que contactaban con terceras personas en la vía pública y parecían realizar algún tipo de "intercambio", e incluso entraban a determinados domicilios en los que permanecían durante un breve espacio de tiempo, lo que hizo sospechar a los agentes que podría tratarse de "puntos negros" de venta de droga al por menor.
Los investigadores constataron sobre el terreno que se estaba produciendo un trasiego inusual de personas en los puntos señalados y que, según las primeras pesquisas, estaba relacionado con el tráfico de drogas, según ha informado la Policía en nota de prensa.
El primero de los registros realizados se llevó a cabo en un domicilio situado en la zona centro de la ciudad, en el que se aprehendieron 20 dosis de cocaína dispuestas para su venta, así como 665 euros en metálico, y se detuvo al responsable de la vivienda.
La droga se encontraba oculta en el doble fondo de una mesa, hecho que llamó la atención de los agentes, puesto que a principios del mes de marzo se halló una mesa de similares características durante el registro realizado en un local de ocio nocturno, por lo que se está investigando la posible relación del detenido con dicho establecimiento.
Los otros dos registros se llevaron a cabo en dos domicilios, situados en las proximidades de los Tres Olivos y en el barrio del Pilar, respectivamente, ambos al parecer utilizados por la misma persona para distribuir y adulterar la cocaína.
En uno de ellos, utilizado para distribuir la droga, se encontraron 51,50 gramos de esta sustancia, tanto en roca como preparada en pequeñas dosis, así como 7.465 euros, al parecer procedentes de la venta ilícita de droga. En el otro domicilio se encontraron balanzas de precisión, material para elaborar papelinas, y varias sustancias para adulterar el estupefaciente y así aumentar su cantidad y el beneficio que obtenían.
En esta última actuación se detuvo al principal responsable de ambas viviendas, así como a dos mujeres que le apoyaban en su actividad delictiva.