El concejal de Gestión de los Servicios del Ayuntamiento de Toledo, Gabriel González, ha informado de que el próximo lunes comenzarán las obras para la instalación de una estación de bombeo en la calle Reyes Católicos. Una obra que garantiza el suministro de agua de Picadas a la totalidad del Casco Histórico en caso de que se produzca una avería en la red de abastecimiento habitual, que proviene del Cerro de los Palos.
González ha explicado en rueda de prensa que se trata de una obra compleja que, no obstante, no supondrá la interrupción del tráfico rodado salvo en momentos puntuales, ya que los trabajos se van a desarrollar en la zona peatonal y ajardinada de la calle que conecta con la Puerta del Cambrón. En cualquier caso, están previstos cortes de agua que coincidirán con las operaciones de enganche al nuevo abastecimiento.
Esta actuación, con un presupuesto de 173.000 euros a cargo de la empresa Tagus, concesionaria del servicio, es la última de las que ha impulsado el equipo de Gobierno para que todo el barrio antiguo disponga de cobertura del agua del embalse de Picadas en caso de que la tubería habitual, la del Cerro de los Palos, sufra alguna rotura o incidencia.
Actualmente, aproximadamente la mitad del Casco Histórico dispondría de agua de Picadas en caso de avería, quedando sin cubrir las zonas más altas; con esta obra, cuyos trabajos se prolongarán durante todo el mes de agosto, se llegará al cien por cien de las viviendas, establecimientos y comercios del recinto amurallado.
Esta intervención se suma a las que el Ayuntamiento ha emprendido o va a emprender en los próximos días, aprovechando el menor ritmo urbano de la época vacacional, para mejorar y renovar el entorno de la ciudad como el adecentamiento de Alberto Sánchez, la zona deportiva de Santa Bárbara, acerado de varias calles, instalación de pistas multideportivas y la remodelación de Gerardo Lobo, cuyas obras comenzarán cuando finalicen las reparaciones de las calles que rodean el Alcázar.
Obras de las calles aledañas al Alcázar
De otro lado, también el próximo lunes 28 de julio se iniciarán las obras de mantenimiento de las calles aledañas al Alcázar de Toledo, que se realizarán en tres fases y conllevarán cortes y cambios en la circulación de esas vías del Casco Histórico.
Durante la ejecución de los trabajos, los autobuses efectuarán sus paradas en la calle Gerardo Lobo, junto a las escaleras mecánicas que enlazan con la calle Armas y la plaza de Zocodover, ha informado el Ayuntamiento en nota de prensa.
Las obras de mantenimiento de las calles La Paz, Unión y Cuesta de los Capuchinos se iniciarán en tres fases. La primera de ellas, se extenderá desde el 28 de julio al 2 de agosto, produciéndose un corte de tráfico completo en la calle La Paz.
La segunda fase, que irá desde el 31 de julio al 7 de agosto, afectará a la calle Unión en el tramo comprendido entre el Ángel del Alcázar y su confluencia con la calle La Paz.
Esta restricción del tráfico sólo afectará a la mitad derecha de la calzada, pudiendo circular los vehículos por el margen izquierdo.
Entre el 8 y el 11 de agosto se realizará la tercera fase de estas obras que conllevará un corte completo en la confluencia de la Cuesta del Carlos V con la de Capuchinos. Debido a ello, los vehículos que suban hacia el Alcázar, deberán desviarse por la calle de La Paz en sentido inverso.
Se podrá acceder hasta la Cuesta de los Capuchinos por las calles La Paz y Unión, en sentido contrario, mientras que la salida se efectuará por la calle Unión hacia la calle Cervantes.
Esta corte de tráfico afectará a todas esta vías y establecimientos: Parking del Corralillo de San Miguel, garaje Alcázar, Hotel Alfonso VI, Restaurante Sancho IV, calles Soledad y Plaza del Seco y establecimientos de la zona. También quedará sin salida la calle Horno de los Bizcochos.
