El fondo documental del historiador toledano José María Ruiz Alonso, fallecido hace un año, ha pasado a formar parte del Archivo Histórico Provincial de Toledo (AHPTO), tras la donación realizada por su viuda, María Isabel Barrios.
El conjunto consta de cuatro cajas de documentos en papel, tres ficheros y un DVD con más de 1,6 gigabyte de documentación informática, todo ello fechado aproximadamente desde 1995 hasta finales de 2015, según ha informado en nota de prensa la Junta.
Además, incluye documentación personal y laboral y entre ella se encuentran numerosas copias y anotaciones que Ruiz Alonso recogió en el curso de sus investigaciones y de su trabajo docente.
Para el Archivo Histórico Provincial esta donación supone la satisfacción de aumentar su aún escasa nómina de archivos personales, que incluía, además del ahora incorporado, los de Rafael Altamira y Javier Malagón.
Al mismo tiempo, representa el reto de conservar adecuadamente unos documentos que, en muchos casos, deben permanecer restringidos al acceso público debido a su edad y que, además, están mayoritariamente en soporte informático. No obstante, el Archivo espera que los documentos que puedan ser accesibles estén dispuestos para su uso público en pocos días.
JOSÉ MARÍA RUIZ ALONSO
José María Ruiz Alonso, nacido en Guadamur en 1953, era licenciado en Historia y en Ciencias Políticas y Sociología por la Universidad Complutense de Madrid y doctor en Historia por la Universidad de Castilla-La Mancha. Catedrático de Bachillerato, tras pasar por varios institutos de España llegó al Instituto de Educación Secundaria 'El Greco' de Toledo, donde permaneció hasta su jubilación.
Como investigador, se especializó en la historia contemporánea de la provincia de Toledo, en particular de la Guerra Civil y el franquismo. Junto con numerosos artículos y colaboraciones en obras colectivas, destaca su libro 'La Guerra Civil en la provincia de Toledo', publicado en 2004.
Además, Ruiz Alonso fue un destacado colaborador de las asociaciones de la 'Memoria Histórica', ayudando a muchas personas a conocer las historias de las muertes de sus familiares y vecinos represaliados durante la Guerra Civil y la postguerra, e incluso a localizar sus tumbas. Gran parte de esa labor se refleja en la documentación que ya se encuentra en el Archivo.
