Christian Gálvez confiesa por primera vez que estuvo a punto de quedarse en silla de ruedas

El presentador de 'Pasapalabra' acudió al programa de Bertín Osborne junto a su pareja y habló de uno de los capítulos más complicados de su vida

Christian Gálvez confiesa por primera vez que estuvo a punto de quedarse en silla de ruedas
photo_camera Christian Gálvez confiesa por primera vez que estuvo a punto de quedarse en silla de ruedas

Según recoge la revista Lecturas, la vida de Christian Gálvez, que estuvo este viernes en 'Mi casa es la tuya', podría haber sido completamente diferente a lo que es tras sufrir un accidente en 2012. El presentador de 'Pasapalabra' le confesó a Bertín Osborne que estuvo a punto de quedarse en una silla de ruedas y perder la movilidad en las piernas.

De pequeño ya las cosas no habían sido fáciles. “Me pusieron unos aparatos en las piernas para dormir, como los de Forrest Gump, y corregir mi problema de crecimiento”, contó. Pero después se creció como el Ave Fénix y triunfó como actor, apareció en Médico de familia y con 21 años consiguió un Premio Ondas por Desesperado club social. “Estaba muy crecido”, reconoció. Después, aunque pensó que le iban a llover las ofertas de trabajo, no fue así y acabó trabajando en una juguetería.

Un día recibió una llamada que le cambió la vida y era para trabajar en Caiga quien caiga, el programa. “¿Hay algún trabajo que te haya aportado muchísimo pero que haya cosas de las que te arrepientas?”, le preguntó a Bertín y eso mismo es lo que le pasó con Caiga quien caiga. “Empezábamos riéndonos de la gente”, se avergüenza Gálvez.

El 2012 fue el año del antes y el después en su carrera profesional y en su vida personal. Entonces se rompió la espalda, se le salió el disco bicéfalo y le cogió el nervio ciático por el que perdió la movilidad de una pierna. Se operó y volvió a aprender a andar, pero pudo haber perdido la movilidad. Aunque tenía que haber estado una larga temporada de baja, el prefirió volver al trabajo y lo hizo con una condición, que pudiera descansar 12 horas. “Por cada hora de pie tenía que estar otra tumbado”

Comentarios