Varios drones se incorporan al operativo de búsqueda del niño de 11 años que desapareció el pasado sábado después de lanzarse con una colchoneta en el río Cabriel, cerca del municipio de Venta del Moro (Valencia), que este miércoles ha arrancado el quinto día de labores para su localización.
Según ha informado el Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia, está previsto que se incorpore el dron de los bomberos del Ayuntamiento de Valencia, así como varios dispositivos más cedidos por una empresa privada y drones de la Generalitat para estas labores.
El uso de estos aparatos ha propiciado que la Generalitat haya activado el Plan Territorial de Emergencias, que regula el uso de estos dispositivos de vuelo sin piloto en las emergencias.
Desde primera hora de la mañana, Bomberos del Consorcio Provincial de Valencia, junto al grupo de actividades subacuáticas de la Guardia Civil, además de brigadas forestales y voluntarios han retomado el rastreo de la zona, después de que ayer se peinará de forma exhaustiva un tramo de 20 kilómetros por tierra, mar y aire.
En total son una veintena de bomberos del Consorcio, de brigadas de la Diputación y voluntarios de Sagunto, especialistas en aguas superficiales, además de los buceadores de los bomberos del Ayuntamiento de Valencia y bomberos del SPEIS de Albacete, así como miembros de Cruz Roja, en un operativo que alcanza las 75 personas.
En la jornada de ayer, los equipos peinaron sin éxito todo el territorio desde el punto en el que se vio por última vez al menor hasta el municipio Villatoya y se efectuó un reconocimiento en helicóptero.
El inspector jefe del Consorcio de Bomberos, José Miguel Basset, aseguró que se está llevando a cabo una "búsqueda exhaustiva" del menor pero que las labores eran "complicadas", a pesar de que se había reducido el caudal, por la cantidad de vegetación y ramas que arrastra el agua, y que se "podían alargar en el tiempo".
