Trabajadores de los centros penitenciarios de Castilla-La Mancha han secundado este jueves la concentración y el paro de media hora convocado por tres sindicatos para protestar por las agresiones y actos de violencia que estos empleados sufren en su labor diaria.
Fuentes del sindicato CCOO, uno de los convocantes junto a Acaip y UGT, han confirmado a Efe que en las prisiones de Albacete, Cuenca, Ocaña I y II (Toledo), Herrera de la Mancha y Alcázar de San Juan (Ciudad Real), "los trabajadores que han podido" han acudido a la puerta de la cárcel bajo el lema 'PrisionesSinAgresiones'.
En este sentido, las mismas fuentes han cuantificado el seguimiento de la huelga en "un 80 por ciento de los trabajadores que han podido", ya que hay empleados que están en los módulos internos o en cocina que no pueden abandonar su puesto de trabajo a pesar de que estén de acuerdo con las reivindicaciones que han motivado la convocatoria de la concentración y el paro.
En concreto, alrededor de una treintena de trabajadores del centro penitenciario de Cuenca se han concentrado a las puertas de la cárcel para protestar por el incremento de la conflictividad y exigir a Instituciones Penitenciarias que tome medidas.
En este caso, José Carlos Tóvar, representante del sindicato Acaip en la cárcel conquense, ha explicado a Efe que la situación ha ido a peor debido a la falta de personal y de recursos especializados en prácticamente todas las cárceles del país para atender a los internos con problemas mentales.
Tóvar reconoce que la cárcel de Cuenca es "pequeña, con mucha interacción" entre presos y trabajadores, donde este problema es menos acusado, pero exige que se les reconozca como agentes de la autoridad o que estas agresiones supongan un incremento de la pena a los internos que las cometen.
Por su parte, en Alcázar de San Juan, fuentes de CCOO han indicado que en torno a una veintena de trabajadores han asistido a la concentración y han realizado el paro de media hora, sobre todo los que están en oficina, y han precisado que la plantilla está en torno a los 100 trabajadores, pero que están organizados por turnos y también hay algunos que están librando, y que, en todo caso, tiene que prestar los servicios mínimos que contempla la ley.
Respecto a la prisión de Herrera de la Mancha, los sindicatos han recordado que dos funcionarios sufrieron heridas de consideración tras un grave altercado el pasado 17 de junio, a lo que se suman insultos y vejaciones y aumento, además, de agresiones entre internos.
Esta prisión, que tiene unos 400 internos, tiene una relación de puestos de trabajo "obsoleta", según los sindicatos, y tiene sin cubrir unas 40 plazas, lo que se agrava con los 55 años de media de edad de los funcionarios.
Según los datos que maneja el sindicato CCOO, en 2018 en el interior de las cárceles se denuncia una agresión cada día, mientras que entre 2015 y 2016 se produjeron 934 agresiones a trabajadores de instituciones penitenciarias.
Además, en 2017 las lesiones graves experimentaron un incremento del 60 por ciento, con respecto al año anterior.
Para hacer frente a este problema, los sindicatos han exigido un incremento de la plantilla, ya que hay más de 3.400 vacantes sin ocupar y un 15 por ciento menos de efectivos de los que debiera de haber.
