Las denuncias por violencia machista en el segundo trimestre del año subieron en Castilla-La Mancha un 2,8 % en comparación con el mismo periodo de 2017, según los datos del Consejo General Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
Los juzgados de Castilla-La Mancha recibieron entre el 1de abril y el 30 de junio 1.326 denuncias por violencia de género, lo que supone un incremento interanual del 2,8 %, y en el conjunto de esas denuncias 1.291 mujeres de la región aparecen como víctimas de violencia machista, lo que supone un 3,7 % más que en el mismo periodo de 2017.
En cuanto a la ratio de mujeres víctimas de esta violencia por cada 10.000 habitantes fue de 12,76 en Castilla-La Mancha, por debajo de la media nacional situada en 16,89.
Asimismo, los asuntos penales de violencia de género registrados en los órganos judiciales de Castilla-La Mancha en el segundo trimestre aumentaron un 1,6 % respecto al segundo trimestre del año anterior (1.616 nuevos asuntos frente a 1.591 en 2017).
En 102 casos la víctima de violencia de género se acogió a la dispensa legal de la obligación de declarar como testigo, una cifra inferior a las 121 del mismo periodo del año anterior, y en cuanto a órdenes de protección se solicitaron 432, de las que 292 correspondieron a españolas y 140 a extranjeras.
Además, de estas 432 solicitudes de órdenes de protección, 11 correspondían a mujeres menores de edad, según los datos del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial.
En el segundo trimestre de este año 242 hombres fueron enjuiciados por violencia de género en Castilla-La Mancha, con el resultado de 192 condenas, lo que supone el 79,3 %.
En el conjunto nacional, las denuncias por violencia machista en el segundo trimestre del año bajaron un 1,4 % en comparación con el mismo periodo de 2017, y también descendieron las solicitudes de órdenes de protección, un 4,2 %.
En total, se presentaron 42.077 denuncias por violencia de género, el 67 % interpuestas por la víctima -un 2 % menos que en 2017-, un 16 % fueron resultado de la intervención directa de la policía, un 9 % a raíz de un parte de lesiones y apenas un 2,1 % de la familia.
También se registró un descenso de las mujeres víctimas, que fueron 40.232, un 0,3 % inferior al dato del mismo trimestre de 2017. En cuanto a la nacionalidad de las víctimas, el 68,3 % eran españolas y el 31,7 %, extranjeras.
Las solicitudes de órdenes de protección, bajaron un 4,2 % hasta las 11.279.
A pesar del descenso de las denuncias y las solicitudes de órdenes de protección, el Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del CGPJ destaca que las sentencias condenatorias aumentaron: las condenas fueron del 69 %, una cifra un 1,2 % superior a la del segundo trimestre del 2017.
Los datos del CGPJ reflejan que la violencia de género se da de forma dispar en las comunidades autónomas y la ratio de víctimas por cada 10.000 habitantes superó la media nacional (16,89) en los casos de Baleares (26,13), Murcia (21,33) y Andalucía (ligeramente superior a 20).
Las ratios más bajas se dieron en Castilla y León (10,25) , Extremadura (11) y Galicia (11,5).
