Septiembre fue muy cálido en Castilla-La Mancha, con 1,1 grados por encima del valor normal
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha confirmado que el mes de septiembre de 2025 en Castilla-La Mancha se caracterizó por temperaturas muy altas y una sequía acusada, situándose entre los septiembres más cálidos y secos de las últimas décadas.
Según el balance climatológico, la temperatura media regional fue de 20,8 ºC, lo que supone 1,1 ºC por encima de lo habitual en el periodo de referencia 1991-2020. El comportamiento térmico fue especialmente notable en Albacete y Ciudad Real, donde se registró un carácter “muy cálido”, mientras que en el resto de provincias fue “cálido”.
Las temperaturas máximas alcanzaron los 39 ºC entre los días 16 y 18 en localidades como Navahermosa y Oropesa (Toledo) y Almadén (Ciudad Real). En contraste, el termómetro descendió hasta los -1,4 ºC en Molina de Aragón (Guadalajara) el día 24. Además, en Quintanar de la Orden (Toledo) se batió el récord de temperatura media mensual más alta en septiembre desde que hay registros, con 21,9 ºC.
En cuanto a las precipitaciones, el mes fue muy seco, con una media de 6,8 litros por metro cuadrado, apenas el 20 % de lo normal. Se trata del séptimo septiembre más seco desde 1961. La situación fue especialmente crítica en Cuenca, donde se igualó el récord de 1970 como septiembre más árido de la serie, con solo 0,4 litros por metro cuadrado. También en Guadalajara se vivió el segundo septiembre más seco desde que hay datos.
El único episodio destacado llegó el 28 de septiembre, cuando las tormentas dejaron 26,6 l/m² en Fuencaliente (Ciudad Real) y 19 l/m² en Almansa (Albacete), acompañados de 274 rayos registrados en un solo día.
Pese a la sequía de septiembre, el año hidrológico 2024-2025 cerró con un carácter húmedo en conjunto, con una media de 499 l/m² en la región, un 105 % respecto al valor normal. No obstante, el reparto fue desigual: Ciudad Real, Guadalajara y Toledo se mantuvieron en la media húmeda, Cuenca en valores normales y Albacete cerró con déficit de lluvias.
Por último, en el apartado de viento, no se registraron rachas fuertes. La máxima del mes se alcanzó en Toledo con 62 km/h el día 19.
Con este balance, septiembre de 2025 queda marcado como un mes de contrastes en Castilla-La Mancha: calor intenso, sequía generalizada y un año hidrológico que, en términos globales, cierra en positivo.