La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ofreció este miércoles al PSOE un pacto de Estado contra la violencia de género, "pero desde la seriedad y la integridad ética", y admitió que no le gustan informaciones como la que emitió CMT por el crimen machista de Cifuentes (Guadalajara).
La vicepresidenta hizo esta oferta a la portavoz socialista Soraya Rodríguez quien, en la sesión de control, le preguntó si el Ejecutivo considera la lucha contra la violencia de género una cuestión de Estado, y cuyo grupo político ya había solicitado al Gobierno un pacto de estado en esta materia.
No obstante, Sáenz de Santamaría le advirtió que si el PSOE pretende hacer de la lucha contra la violencia machista un motivo de oposición "le digo que, a mi, ni hoy ni nunca me va a encontrar".
La vicepresidenta pidió al PSOE su apoyo para varias leyes "porque las leyes mas fuertes hacen mas fuertes a las mujeres y les da fortaleza para denunciar".
Por eso, le pidió a la oposición que apoye la reforma del Código Penal "para que los matrimonios forzados sean un delito", para reforzar el castigo por acoso y hostigamiento, para que el delito continuado sea mas grave, para reforzar la vigilancia de los agresores en libertad vigilada y para que las víctimas tengan justicia gratuita.
La portavoz socialista fue muy crítica con el Gobierno y le reprochó a la vicepresidenta que la lucha contra la violencia machista no figure entre las prioridades de la agenda política del Ejecutivo cuando el número de mujeres muertas en la última década asciende a 700.
Rodríguez criticó que el Ejecutivo de Rajoy haya recortado un 30% el presupuesto estatal de la lucha contra la violencia de género.
En opinión del PSOE el pacto de Estado es necesario para que "no se recorte ni un euro" del presupuesto en esta materia, para que no haya retrocesos "como la eliminación de la asignatura de Educación para la Ciudadanía", para que el nuevo Código Penal elimine la necesidad de denuncia de la víctima en el delito de hostilidad y acosamiento o para que, en la reforma local, no se elimine ningún servicio dirigido a las víctimas en los ayuntamientos.
Además, Rodríguez dijo, el pacto debería incluir que ninguna entidad que reciba fondos públicos, como la Iglesia católica, pueda editar libros como "Cásate y se sumisa", que "atentan contra la dignidad de las mujeres" o ninguna televisión pública pueda ilustrar un crimen machista con una picadora de carne "con el silencio del Gobierno", en alusión al tratamiento informativo del crimen de Cifuentes en CMT.
En su respuesta, la vicepresidenta del Gobierno consideró que la educación en igualdad "no es una asignatura" sino que "debe ser la vida diaria de todos nosotros" y aseguró que a ella tampoco le gustan "esos libros ni esas informaciones".
"Pero creo que lo que menos puede convencer a una mujer para que denuncie y para que sea valiente es que usted y yo nos tiremos los trastos a la cabeza", aseveró Sáenz de Santamaría.
