La Red de Mujeres Emprendedoras, impulsada por la Federación de Mujeres y Familias del ámbito rural (Amfar), ha asesorado a más de 700 mujeres que viven en zonas rurales de Andalucía, Castilla-La Mancha y Castilla y León.
Así lo ha asegurado esta organización en un comunicado, en el que han indicado que este asesoramiento, desarrollado a través de talleres técnicos y seminarios, ha mejorado las posibilidades reales de inserción laboral de las mujeres que viven en estas zonas rurales, especialmente de aquellas más jóvenes que quieren iniciar una actividad de autoempleo.
Así lo ha asegurado la presidenta nacional de Amfar, Lola Merino, quien ha subrayado que esta iniciativa coincide en su implantación con la tendencia alcista del emprendimiento femenino, como indica el dato de que, durante el primer semestre, las emprendedoras crecieron un 2,5 por ciento en todo el país.
"Para la mujer que vive en las zonas rurales, el autoempleo no sólo es una solución al desempleo, sino también una posibilidad de acceso a un trabajo de calidad; ser su propia jefa o manejar por sí misma la compatibilidad entre vida personal y profesional", ha reseñado Merino.
Y ha subrayado que la Red de Mujeres Emprendedoras ha dotado al colectivo de una herramienta eficaz para avanzar en su capacitación técnica en sectores como el agroalimentario, el turismo o los servicios sociales.
Este proyecto ha formado parte del Programa de Igualdad de Género y Conciliación cofinanciado con fondos del Mecanismo Financiero del Espacio Económico Europeo 2009-2014, que gestiona el Instituto de la Mujer, a través del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y en el que Amfar participaba con la colaboración de la Universidad de Bifröst (Islandia).
