La pareja de lechuza del Parque Nacional de Cabañeros tiene "familia numerosa"

La pareja de lechuza comenzó la nueva temporada de cría a primeros de marzo coincidiendo con el inicio de la puesta de los huevos, un proceso que se ha prolongado durante casi un mes
La pareja de lechuza del Parque Nacional de Cabañeros tiene "familia numerosa" - EFE/Beldad
photo_camera La pareja de lechuza del Parque Nacional de Cabañeros tiene "familia numerosa" - EFE/Beldad

La pareja de lechuza común (Tyto alba) que cría en una caja nido del Parque Nacional de Cabañeros cuenta desde hace unos días con un gran familia numerosa compuesta por ocho pollos que han ido naciendo a lo largo de este mes de abril.

Según ha explicado a Efe el director del Parque Nacional de Cabañeros, Ángel Gómez, la pareja de lechuza comenzó la nueva temporada de cría a primeros de marzo coincidiendo con el inicio de la puesta de los huevos, un proceso que se ha prolongado durante casi un mes.

Durante el mes de abril, los pollos de lechuza han ido naciendo progresivamente hasta que el día 20 tuvo lugar el nacimiento del último polluelo.

Todo esto, ha explicado Gómez, se ha podido seguir en directo vía online las 24 horas al día a través de una cámara web que el Parque Nacional de Cabañeros y la organización SEO/BirdLife han instalado en una caja nido para poder seguir la evolución, sin molestarla, de todo el proceso de cría de esta especie tan emblemática.

Los ocho pollos permanecen vivos afrontando, los últimos que han nacido, los momentos más críticos para poder salir adelante, ha explicado el director del parque, "debido a que existe una gran diferencia de tamaño entre los que nacieron en los primeros días del mes y los que lo han hecho en los últimos días, lo que supone tener que pelear por la comida".

Gómez ha reconocido que resulta llamativo que hayan eclosionado los ocho huevos, lo que supone un gran éxito para esta pareja, ya que lo habitual es que saquen adelante un promedio de cuatro o cinco huevos.

De hecho, en la pasada temporada de cría esta pareja logró sacar adelante cinco pollos, ha recordado.

El futuro de estos polluelos dependerá de la disponibilidad de alimentos que encuentren en el parque para garantizar su buena alimentación, ha dicho, "lo que obliga ya a la pareja a cazar constantemente para mantener llena su despensa y cubrir las necesidades alimenticias de sus polluelos".

La webcam instalada en esta caja nido está permitiendo que muchos internautas sigan a diario la actividad de la especie.

Algunos de ellos, en el seguimiento que realizan, han llegado a contabilizar el número de presas que aporta cada día al nido la pareja y que la pasada noche alcanzó las 25 presas.

Este importante número de presas, han explicado algunos de los seguidores en el chat de la webcam, se ha aproximado al récord de 33 presas que logró, en un sola noche, la pareja la pasada temporada de cría.

Muchos de ellos, a través de sus comentarios ponen de manifiesto el buen comportamiento que demuestra esta pareja a la hora de criar a sus pollos, debido a que tanto el macho como la hembra están considerados como buenos cazadores.

Han apuntado que el año pasado eran capaces de traer varias presas con pocos minutos de margen entre las entradas del macho y la hembra al nido.

Aunque la lechuza común no está catalogada como especie en peligro, su población presenta una tendencia negativa, teniendo en cuenta los datos disponibles para esta especie en la Península Ibérica.

En el conjunto de Europa se ha estimado una población de 100.000 a 210.000 parejas, de las que entre 50.000 y 90.000 nidifican en España.

Su principal amenaza es la destrucción o alteración del hábitat de caza y nidificación, a lo que se une también las concentraciones parcelarias, los cambios en los usos agrícolas y el empleo de plaguicidas que han reducido considerablemente la disponibilidad de sus presas.

La destrucción y recuperación de edificios viejos han reducido también los lugares adecuados para la reproducción, lo que supone otra amenaza añadida para la especie, a lo que une la caza ilegal y los atropellos.

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