La OMS publica el trabajo de una investigadora española sobre contaminantes en colegios

El documento de la OMS ofrece las pautas para monitorear y controlar los contaminantes químicos más comunes del aire interior en entornos públicos para niños como escuelas, jardines de infancia y guarderías

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado este jueves un documento sobre los métodos de muestreo y análisis de contaminantes en el aire interior de los colegios que ha sido elaborado por la investigadora española Florentina Villanueva.

El documento de la OMS ofrece las pautas para monitorear y controlar los contaminantes químicos más comunes del aire interior en entornos públicos para niños como escuelas, jardines de infancia y guarderías, en los que éstos pasan muchas horas y ofrece, además, una herramienta para evaluar los riesgos a los que se pueden someter los niños durante una exposición combinada a estos múltiples productos químicos.

La OMS, que sugiere en sus informes que la contaminación atmosférica en interiores contribuye significativamente al riesgo de efectos adversos sobre la salud respiratoria en niños, hace público este documento para que sirva de guía sobre las acciones que se pueden tomar para evitar estos efectos adversos.

Villanueva, que trabaja en el Instituto de Investigación en Combustión y Contaminación Atmosférica de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) que forma parte del Parque Científico y Tecnológico regional, ha explicado a Efe que el documento es fruto de un "duro trabajo" desarrollado durante varios años al que han contribuido las aportaciones del miembros del Centro de Medio Ambiente y Salud de la OMS, e investigadoras y personal técnico de organismos públicos de Inglaterra, Portugal, Noruega, Alemania y Bélgica.

La publicación proporciona información sobre métodos de muestreo y análisis de los 17 productos químicos y alrededor de 40 otros contaminantes de interés que se encuentran en el aire interior de estos espacios que acogen a niños y que deben ser considerados en los programas nacionales de monitoreo de la calidad del aire interior, ha razonado.

Y ha añadido que los compuestos orgánicos volátiles sobre los que se ha de hacer un seguimiento especial se originan principalmente en pinturas, productos de construcción, muebles, colas, barnices o con el uso de los ambientadores y productos de limpieza, entre otros.

"Junto a estos compuestos, existen otros contaminantes, como el dióxido de nitrógeno (NO2) y ozono (O3), que se encuentran de forma normal en el aire exterior, pero que penetran los ambientes interiores de diferentes maneras", ha ampliado.

Para la investigadora, la importancia de medir las concentraciones de contaminantes en el aire interior ha sido ampliamente discutido, dado que muchos productos químicos que son peligrosos para la salud están presentes en altas concentraciones y tienen un efectos adversos para la salud.

"La determinación de las concentraciones de contaminantes del aire interior es fundamental para muchos objetivos, como la evaluación de riesgos para la salud, el observar las tendencias temporales y espaciales de la calidad del aire interior y desarrollar medidas que puedan contribuir a reducir el riesgo para la salud de los niños", ha concluido.

Comentarios