La Audiencia Provincial de Cáceres ha acogido hoy el inicio de un macrojuicio contra 14 personas pertenecientes a una organización criminal acusadas de cometer robos con violencia de cobre y patrimonio en las provincias de Cáceres, Toledo, Guadalajara, Ciudad Real y Valladolid.
La Fiscalía solicita para los cuatro cabecillas penas de hasta 46 años de prisión y para el resto condenas que van desde los 4 a los 16 años de cárcel, mientras que las defensas han pedido la absolución para sus clientes.
Los hechos, según el escrito de calificación al que ha tenido acceso Efe, se desarrollaron entre agosto de 2014 y abril de 2015, cuando el grupo perpetró numerosos robos en distintas provincias españolas.
El jefe del grupo dirigía las operaciones desde su domicilio auxiliado por su esposa, según indica la Fiscalía, y se servía de un lugarteniente y dos conductores para llevar a cabo los robos con la ayuda de los restantes acusados.
Los robos fueron cometidos tanto en domicilios de particulares como en empresas privadas, llegando en varias ocasiones a golpear, atar y amenazar al vigilante de seguridad para que les indicase dónde se encontraba el dinero y los objetos de valor.
No obstante, se señala que el grupo estaba especializado en el robo de cable de cobre del tendido eléctrico, así como que ocasionaban numerosos daños materiales a la hora de cometer los presuntos delitos.
Los acusados, en su mayoría, tienen su residencia en el poblado de El Gallinero, en la Cañada Real de Madrid, desde donde se desplazaban hasta las provincias limítrofes.
El grupo fue desmantelado por la Guardia Civil en abril de 2014 dentro de la operación llamada "Furt" y desde entonces cinco de los 14 acusados se encuentran en prisión.
El juicio, que está previsto dure hasta el viernes, 2 de junio, en sesiones de mañana y tarde, ha dado comienzo hoy con las cuestiones previas tras no haber llegado en ninguno de los casos a conformidad.
La abogada de uno de los acusados que supuestamente ejercía de chófer, Ana Isabel Plasencia, ha indicado a los medios que tanto las cuestiones previas como la estrategia de las defensas se basan en que "ha habido errores en la instrucción que pueden viciar el procedimiento".
En este sentido ha aclarado que "no se han tomado las declaraciones correctamente" así como las pruebas que va a presentar la acusación.
