El Gobierno de Castilla-La Mancha está desarrollando estos días una misión inversa con agentes educativos de enseñanza en español procedentes de Estados Unidos, con el fin de impulsar posibles proyectos de intercambio de estudiantes con centros que ofrecen esta enseñanza en la región.
La acción se está llevando a cabo a través del Instituto de Promoción Exterior de la Consejería de Economía, Empresas y Empleo, y forma parte del Plan de Promoción Internacional del IPEX para este año, ha informado la Junta en nota de prensa.
La misión comercial inversa se realiza con una delegación de agentes educativos procedentes de Seattle que desarrollan proyectos de intercambio de alumnos y profesores en el exterior en los centros educativos, colegios e institutos, para los que trabajan en el estado de Washington, en el que hay más de 30.000 alumnos que cursan español en institutos y escuelas secundarias.
Los agentes educativos, que a su vez son profesores, están manteniendo estos días reuniones con escuelas privadas de español para extranjeros que llevan a cabo cursos de verano y también estancias durante el curso escolar en Toledo, Cuenca y Sigüenza (Guadalajara).
El programa de estos centros incluye el alojamiento en familias seleccionadas para la residencia de los estudiantes durante el tiempo en el que dura el curso.
Además de las reuniones con las escuelas que desarrollan estas enseñanzas en Castilla-La Mancha, los agentes educativos que forman parte de la misión comercial inversa han mantenido una reunión con la dirección de un instituto bilingüe de Toledo que está promoviendo programas de intercambio con Estados Unidos y Escocia, mostrando la delegación estadounidense un alto interés por la posibilidad de establecer convenios de colaboración entre las partes.
El sector de la enseñanza de idiomas genera un elevado volumen de negocio, y es en España un sector de alto crecimiento al que se suman escuelas privadas con altas afluencias de alumnos extranjeros, en el caso de la enseñanza del español. En Castilla-La Mancha existe una incipiente oferta que aprovecha la comodidad, cercanía y el sistema de comunicaciones con los que cuentan ciudades que son Patrimonio de la Humanidad como Toledo y Cuenca.
