Expertos de España, Portugal y Suecia en la conservación de la grulla común (Grus grus) han alertado de los riesgos que la intesificación agraria entraña ya para la conservación de las aves en España y, en especial, para una especie como la grulla, ligada a la agricultura tradicional.
Jose Antonio Román, ornitólogo y coordinador del Censo Nacional de Grullas, ha explicado a Efe que ésta es una de las principales conclusiones recogidas en un documento suscrito por todos los expertos, tras la celebración de las II Jornadas Nacionales de Grullas.
Román, ha comentado que los expertos coinciden en que si se quiere seguir disfrutando de las grullas en los campos, se deben preservar las condiciones actuales de las zonas donde se las ve, lugares en donde se ha de intentar frenar la proliferación de cultivos que fragmentan su hábitat actual.
La destrucción de sus hábitats es una de sus principales amenazas, por lo que los expertos consideran que se deberían potenciar los usos tradicionales como el cereal de secano con bajo impacto paisajístico.
Los expertos han recordado que España está sufriendo un segundo proceso de intensificación por acciones dirigidas al incremento de la producción agraria, mediante el aumento del tamaño de campo, la mecanización, el riego y, sobre todo, el creciente uso de agroquímicos, fundamentalmente herbicidas, lo que está generando graves problemas de conservación sobre la biodiversidad y, especialmente, sobre las aves de zonas agrarias.
Además, han dicho, se ha favorecido, de forma directa o indirecta, la desaparición de gran cantidad de superficie de barbechos y otros hábitats seminaturales con cubierta vegetal espontánea, que se ha estimado en 1,1 millones de hectáreas desde 2002.
Revertir esta situación, han apuntado, es fundamental para la conservación de las aves ligadas a las zonas agrarias, entre ellas, la grulla común.
Los expertos también han considerado que se debe continuar con el trabajo de seguimiento de la migración de las grullas para conocer más aspectos de esta especie, intentando la coordinación entre los diferentes grupos autonómicos, principalmente entre los más cercanos.
En este sentido, también han abogado por seguir conociendo más aspectos sobre la migración nocturna de la especie, de la que, han dicho, se debe seguir realizando, al menos, dos censos ibéricos, mejorando los realizados en dormideros y censos en áreas de alimentación.
Otra de las conclusiones de este encuentro aboga por continuar con el seguimiento de la población juvenil y la localización de ejemplares marcados con anillas, que es la base para poder interpretar determinados movimientos invernales, a corta, media o larga distancia.
También han visto necesario analizar y estudiar los futuros impactos que pueden afectar a la especie, a sus desplazamientos migratorios y a sus desplazamientos diarios durante la invernada y a sus hábitats de alimentación, reposo y dormideros.
Para los expertos, es muy importante que las administraciones responsables de la aprobación de parques fotovoltaicos tengan en cuenta las zonas de dehesas, pastos, cereales de secano que ellas utilizan y eviten en lo posible la ubicación de estas estructuras.
