El Gobierno de Castilla-La Mancha va a pedir una reunión urgente al vicepresidente de Derechos Sociales, Pablo Iglesias, para tratar temas de dependencia e insistir en la deuda "histórica" que mantiene el Gobierno de España en financiación del sistema de dependencia en la región que, desde 2012, asciende a 500 millones de euros.
Este ha sido uno de los temas tratados en la reunión del Consejo de Gobierno, del que ha informado en rueda de prensa la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, quien ha dicho que también se está a la espera de que se convoque el Consejo Territorial del Sistema de Dependencia, que ya debería haberse producido.
Sánchez ha explicado que el Consejo de Gobierno ha analizado en su reunión de esta semana los datos publicados por el Observatorio de la Dependencia, que otorgan a Castilla-La Mancha una nota de notable alto (8,6) en atención a la dependencia.
Un dato, ha dicho la consejera, que contrasta con los ofrecidos a nivel nacional cuya perspectiva no es "nada halagüeña" por la paralización y enlentecimiento e incluso en algunas comunidades, retroceso, en la atención a las personas en situación de dependencia.
En Castilla-La Mancha, ha destacado, se ha conseguido remontar los recortes de 2012 gracias a la "voluntad política de defender la dependencia" y "velar por el bienestar de las personas más vulnerables", y eso, ha dicho, se está haciendo "a pulmón" porque más del 80 % de la financiación del sistema de dependencia de la región es dinero que aporta la comunidad autónoma, que supera los 400 millones de presupuesto.
De ahí la necesidad, ha dicho Sánchez, de urgir al Gobierno de España a que aporte una financiación adecuada del sistema, porque con los datos publicados ayer, se muestra la necesidad de poner el tema de la dependencia en la agenda política.
El sistema de dependencia, ha indicado la consejera, además de garantizar a las personas el derecho que tienen por ley a los cuidados de larga duración, es un "yacimiento de riqueza y empleo", porque en Castilla-La Mancha suman 16.000 puestos de trabajo, lo que contribuye a su vez a fijar población, y además, se trata de empleo de calidad, estable, y de forma mayoritaria femenino.
Algunos de los datos que ha resaltado Sánchez son la nota media obtenida por Castilla-La Mancha del 8,6 en el ejercicio de 2019 frente al 4,6 que tenía en 2015, lo que la sitúa como la segunda comunidad autónoma en gestión de la dependencia.
Por cuarto año consecutivo, ha continuado, se ha registrado un aumento del número de personas atendidas, que en 2019 fue del 7,5 % respecto al año anterior.
A su vez, ha descendido a 3.900 el número de personas que se encuentran en el "limbo" de la dependencia, es decir, valoradas pero pendientes de contar con una prestación, cuando según ha recordado, en 2015 eran 26.000 personas.
Sánchez también ha valorado que se han incrementado los servicios de proximidad, en el hogar y el entorno de la persona dependiente, que por lo general quiere permanecer en su casa o cerca.
En ese sentido, ha señalado que más del 70 % de las prestaciones son de servicios de proximidad como teleasistencia, ayuda a domicilio y servicios de promoción de la autonomía personal (Sepap).
Ha recordado además que el gasto público por persona dependiente en Castilla-La Mancha es superior a la media de España, de 915 euros por persona en la región frente a 665 euros de media nacional, lo que sitúa a Castilla-La Mancha en la tercera posición.
En esta región hay más de 62.000 personas incluidas en el sistema de dependencia y concedidas cerca de 76.000 prestaciones.
