El Gobierno de Castilla-La Mancha garantizará la tutela de las personas con discapacidad en el caso de que falten sus familiares, lo que se plasmará en un decreto este mismo verano para luego incorporar este planteamiento en la reforma que se emprenda del Estatuto de Autonomía.
Así lo ha anunciado el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, en su discurso tras la firma de un protocolo de colaboración entre la Junta y dieciocho entidades sociales de la región para el desarrollo de programas de atención a personas con discapacidad.
García-Page ha explicado que cuando se modifique el Estatuto de Autonomía se va a incorporar la tutela garantizada de las personas con discapacidad como una obligación por parte de la Administración.
De esta forma las familias tendrán la certeza de que, cuando falten los padres, sus hijos van a estar atendidos en una residencia u otro recurso, lo cual es una de las principales preocupaciones de los familiares de personas discapacitadas.
Ya este mismo verano, ha dicho el presidente regional, se publicará de forma previa un decreto que recoja esa garantía de tutela por parte de la Administración, para que "no falte una plaza en una residencia o una institución cuando falten los padres".
García-Page ha asegurado que esta será la gestión de la que se sentirá más orgulloso cuando termine su mandato.
También ha avanzado que a lo largo de este año se va a redactar una ley del tercer sector, para lo que ha invitado a participar a las organizaciones de discapacidad, y ha dicho que se ocupará del debate entre lo publico y lo privado, porque "lo uno necesita de lo otro".
El presidente regional ha manifestado su deseo de que nunca más vuelva a pasar que los que más sufren por la crisis sean precisamente aquellos servicios que se dedican a ayudar a quien más lo necesita, y en ese sentido, ha apuntado que los presupuestos regionales, en los que hay que priorizar, dedican más dinero a bienestar social, sanidad y educación.
Hoy en España, ha dicho García-Page, se habla de déficit, pero se ha preguntado por qué no se habla de superar el déficit social y de igualdad.
Y ha afirmado que en 2016 Castilla-La Mancha va a cumplir el objetivo de déficit, sin recortes y sin subir impuestos.
García-Page ha pronunciado estas palabras en el acto que ha tenido lugar en el Palacio de Fuensalida de firma de un protocolo con dieciocho de las 156 entidades que trabajan en el mundo de la discapacidad y que concurrieron a la convocatoria de subvenciones para el mantenimiento de centros, recogida en la Orden de 23 de diciembre de 2015.
Según ha explicado la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, la convocatoria se ha resuelto para esas 156 entidades, de las que 80 son regionales y 76 provinciales, por un montante total de 4,9 millones de euros.
Los convenios suscritos hoy permitirán gestionar 3.451 plazas residenciales, del total de 10.263 plazas que existen en la región.
Corresponden 995 a plazas residenciales, 1.546 son plazas en centros ocupacionales, 463 en centros de día y 474 en centros de atención temprana.
En representación de las organizaciones y entidades que trabajan en favor de las personas con discapacidad ha tomado la palabra Luis Perales, quien ha valorado la cercanía y colaboración del presidente regional y de la consejera.
Ha explicado que han pasado cinco años con los convenios congelados, sin subidas, lo que ha sido muy duro, y ha apuntado que para el año próximo se podrían incrementar.
Perales ha destacado la profesionalidad de las personas que trabajan con los discapacitados, al tiempo que también ha solicitado que, cuando haya posibilidad, se realicen reparaciones en los centros que sean más antiguos o se encuentren más deteriorados.
