Castilla-La Mancha trabaja en un proyecto contra la brecha digital en la infancia y la adolescencia

La consejera de Bienestar Social ha subrayado que el objetivo del proyecto es “impulsar el buen uso de las tecnologías en un colectivo tan vulnerable como son los niños, niñas y adolescentes, con medidas de tutela o guarda o adolescentes en situaciones de inseguridad para que puedan impulsar sus capacidades digitales y evitar así su exclusión en una sociedad tan conectada como la nuestra”
Castilla-La Mancha trabaja en un proyecto contra la brecha digital en la infancia y adolescencia
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El Gobierno de Castilla-La Mancha está trabajando con la Plataforma de Organizaciones por la Infancia (PoiCLM) en un “innovador” proyecto piloto para acabar con la brecha digital en la infancia y la adolescencia.

En concreto, tal y como ha destacado la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, se trata de “impulsar el buen uso de las tecnologías en un colectivo tan vulnerable como son los niños, niñas y adolescentes, con medidas de tutela o guarda o adolescentes en situaciones de inseguridad”.

Para ello, se ha dotado a la plataforma con 1,3 millones de euros, financiados con fondos europeos procedentes del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, con los que se busca paliar las consecuencias económicas y sociales ocasionadas por el impacto de la Covid-19 en toda Europa y su especial repercusión en los colectivos más desfavorecidos o en riesgo de exclusión, según ha informado la Junta en nota de prensa.

Tal y como ha explicado la consejera, dentro de este colectivo se encuentran los niños, niñas y adolescentes tutelados o en guarda, que requieren siempre la prestación de más atención y cuidados, evitando que esta crisis pueda ocasionar un impacto directo sobre su educación y formación; permitiendo, por el contrario, impulsar sus capacidades digitales de cara a su inclusión en una sociedad actual digitalizada.

En este sentido, la subvención directa va dirigida a la PoiCLM, por un total de 1.300.384 euros, para la adquisición de equipamiento y desarrollo de iniciativas formativas relacionadas con el acceso y manejo de las redes sociales y la ciberseguridad, entre otros aspectos, con el objetivo de que “puedan impulsar sus capacidades digitales y evitar así su exclusión en una sociedad tan conectada como la nuestra”, ha afirmado García Torijano.

El colectivo destinatario de las actuaciones serán los niños y niñas tutelados o en riesgo, los y las jóvenes del programa de autonomía personal y personas menores de edad o jóvenes cumpliendo una medida judicial de internamiento en centro, así como a las familias de acogida y los y las profesionales de los recursos residenciales de protección y de medidas judiciales. De esta forma, se espera beneficiar directamente a cerca de 1.500 menores y 150 profesionales.

PRIMEROS PASOS DEL PROYECTO

Tras la publicación en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM), el pasado 29 de julio, del Decreto de concesión de ayuda, ya se ha producido la primera reunión de trabajo sobre el proyecto entre el director general de Infancia y Familia, Gregorio Gómez Bolaños, y miembros de su equipo, con representantes de la POI encabezados, por su presidente, Gregorio Fernández.

Entre las principales líneas de actuación planteadas para el desarrollo del programa se contempla la adquisición de equipamiento y dispositivos, infraestructura y conectividad, la planificación y puesta en marcha de acciones de comunicación y coordinación, así como las actividades formativas que capaciten a los participantes de la red de protección de menores en competencias digitales.

La voluntad de la Consejería de Bienestar Social a la hora de implantar este programa a cargo de las entidades de la Plataforma, que son quienes gestionan en su mayoría los centros de acogimiento residencial de menores y están implicadas, asimismo, en los procesos de acogimiento familiar, es que se desarrolle bajo un perfil lúdico adaptado por edades.

Según este modelo, en cuyo desarrollo ya se está trabajando, los y las participantes recibirán información sobre los puntos fuertes y débiles de seguridad en aplicaciones móviles de mayor uso según edades. También se incluirán juegos de simulación de situaciones de riesgo aportando estrategias para abordarlas y se fomentará la participación en esas actividades del juego en grupo de los adultos responsables, a quienes se les entrenará en herramientas de autocontrol de uso y de control parental según edades. 

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