La España rural clama en Madrid contra las macroplantas que arrasan sus pueblos

La España rural clama en Madrid contra las macroplantas que arrasan sus pueblos
Alrededor de 1.500 personas han acudido a esta convocatoria que ha recorrido el Paseo del Prado desde Atocha hasta Cibeles.

Unas 1.500 personas han marchado este domingo en Madrid para denunciar el abandono del medio rural, "vaciado" de servicios públicos y víctima de numerosas "agresiones" en forma de macroproyectos de energías renovables que amenazan sus recursos naturales y el modo de vida de sus vecinos.

Bajo el lema 'Salvemos el mundo rural agredido', alrededor de 1.500 personas -según han informado fuentes de la Delegación del Gobierno- llegados de pueblos de toda España han acudido a esta convocatoria, respaldada por medio centenar de entidades, que ha recorrido el Paseo del Prado desde Atocha hasta Cibeles.

Lo han hecho al grito de "¡Especuladores fuera de mi tierra!" o "¡Placas no, olivos sí!" y numerosas pancartas con mensajes en contra de proyectos como la megaplanta solar de Lopera (Jaén), la mina de litio de Cañaveral en la comarca de Monfragüe (Cáceres) o la planta de biogás en Machacón (Salamanca).

 

Denuncian un "vaciamiento" de los pueblos

Uno de los miembros de la coordinadora 'Salvemos el mundo rural agredido', Ernesto Romeo, ha explicado a los medios que esta protesta busca denunciar la falta de servicios públicos, que ha provocado un "vaciamiento" de los pueblos para "sacrificarlos" a favor de la especulación de grandes empresas.

Compañías que considera autoras de múltiples "agresiones" en forma de proyectos de "macrorrenovables" que están provocando "la mayor destrucción medioambiental de la historia de España", como la "plaga" del biogás, las macrogranjas o las minas, que están "arrasando pueblos" sin respetar a la gente que vive en ellos.

La marea de manifestantes ha entonado cánticos en contra de todos estos proyectos -"¡Que pongan los molinos en la Puerta del Sol!"- de puesta en valor del medio rural - "¡El campo es mucho más que un resort en vacaciones!"- y de denuncia anta la falta de recursos: "¡En mi pueblo había un bar, lo tuvieron que cerrar!".

Han acudido a esta manifestación vecinos de todos los rincones de España, como Rafael Alcalá, de Lopera (Jaén), quien ha explicado que la empresa Greenalia ha presentado varios proyectos de planta fotovoltaicas en su zona que pretenden "expropiar a propietarios legítimos su olivar y su medio de vida".

 

Alcalá ha denunciado que esta empresa trata de "amedrentar" a los agricultores y a los propietarios del pueblo, cuya población se dedica en un 90 % al olivar, para conseguir un alquiler mucho más económico cuando este proyecto no creará empleo ni traerá ningún otro beneficio al municipio.

O Rosa Calero, de Villarobledo (Albacete), que se ha desplazado este domingo a Madrid para denunciar los "vertederos ilegales" instalados en el entorno de su localidad y la privatización de su sanidad: "No hay médico suficientes, así que nos llevan a las clínicas privadas a hacernos pruebas cuando tenemos un hospital que tiene de todo de todo", ha lamentado.

La reducción de las listas de esperas en sanidad en Teruel o la repertura de la línea férrea Guadix-Baza-Almanzora-Lorca en las provincias de Granada, Almería y Murcia son otras de las muchas reivindicaciones que se han puesto en valor durante la manifestación.

También ha participado en la protesta el portavoz de Aragón-Teruel Existe, Tomás Guitarte, quien, en declaraciones a los medios, ha recordado que, a lo largo del siglo XX, muchos territorios sufrieron una "despoblación forzada" en favor del desarrollo de otras partes del país.

Ahora, cuando es momento de "pagar esas deudas", se hace "todo lo contrario" al dejar que lleguen a ellos proyectos de extracción de recursos sin ningún compromiso con los pueblos: "Hemos dicho que basta ya, hay que ir a otro modelo de país en el que todo el mundo tengamos oportunidades y no unos, siempre los mismos, sean los que tengan que sacrificarse para el desarrollo de los demás", ha protestado.