La Federación de empresarios de transporte de pasajeros por carretera de Castilla-La Mancha ha negado este miércoles que los autobuses escolares carezcan de cinturón de seguridad y ha afirmado que el sistema de la región es "el más seguro de los que existen".
En un comunicado de prensa, a raíz de las declaraciones el pasado viernes del director general de Transportes, David Merino, sobre la antigüedad y seguridad de los vehículos, los empresarios del transporte han mostrado su "perplejidad" y han negado "de manera rotunda" que los autobuses no dispongan de cinturones de seguridad para los usuarios.
En este sentido, la Federación ha afirmado que el transporte escolar en Castilla-La Mancha ha sufrido "una mejora importantísima" en los dos últimos años "en todos los aspectos", y que está garantizada la seguridad de los alumnos en los desplazamientos a sus centros de estudio.
"Se garantiza la seguridad y calidad tanto del servicio como de los alumnos", ha subrayado, además de recalcar que tanto las empresas como los conductores que prestan el servicio son "profesionales con una larga experiencia y preparación en el sector".
Además, ha recalcado que "la gran mayoría" de autobuses disponen de cinturones de seguridad, y han recordado que todas las empresas que han renovado u obtenido alguna ruta en el último contrato, están obligadas a disponer en sus vehículos de este dispositivo.
En cuanto a la antigüedad, los empresarios han indicado que "no es cierto" que los autobuses que se utilizan en las rutas escolares tengan 16 años de antigüedad, sino que "la inmensa mayoría" son vehículos "modernos" dotados de las medidas de seguridad "más innovadoras impulsadas por los fabricantes".
Del mismo modo, han explicado que "la gran mayoría" de los vehículos que prestan el servicio escolar tienen menos de 10 años, por lo que tampoco es cierto que la antigüedad mínima de los mismos sea de una década.
No obstante, han precisado que la normativa vigente contempla que los autobuses de transporte escolar pueden realizar este tipo de servicios hasta los 16 años, para lo cual deben superar unos "rigurosos controles de seguridad" que se supervisan en las ITV cada seis meses y que es un trámite es obligatorio para garantizar la seguridad de los niños que transportan, ha concluido la Federación.
