La Dirección General de Agenda 2030 y Consumo ha recomendado, con motivo de la Navidad, diversos consejos a la hora de adquirir un juguete como es la ayuda a los más pequeños a la hora de elegirlos y tener en cuenta las características de estos productos y de la edad, y conjugarlos con la seguridad.
En un comunicado, ha avisado de la importancia que tiene una elección adecuada, en torno a criterios educativos y lúdicos, evitando dejarse llevar por la intensa publicidad que se lleva a cabo durante estas fechas lo que, en ocasiones, conlleva conductas de cansancio temprano en su uso o, incluso, de cierta decepción.
Ha defendido la necesidad de verificar el etiquetado de los juguetes, que los materiales de fabricación no sean tóxicos, así como vigilar la presencia de las piezas que, por su pequeño tamaño, de forma separada, puedan suponer un riesgo para la seguridad de las niñas, y también lo que se refiere a partes afiladas o bordes cortantes.
Al tiempo, el evitar adquirir juguetes que desprendan un fuerte olor, pues podrían contener elementos volátiles en el plástico que pueden ser nocivos para la salud, y elegir aquellos que resulten lo más ecológico posible, atendiendo al impacto ambiental de sus residuos y los materiales empleados para su fabricación.
Por ello, ha recomendado juguetes hechos con materiales renovables (madera, cartón, etc.) antes que los fabricados mediante procesos industriales (materiales sintéticos, plásticos, etc).
Del mismo modo, el priorizar juguetes participativos que permitan jugar con hermanos y amigos, es decir, compartir los juegos, y evitar los de contenido bélico o sexista, porque "no hay que olvidar que el juego es una forma de aprendizaje", así como valorar otro tipo de regalos como libros, ropa o material deportivo.
El comunicado ha agregado que "es fundamental leer siempre las etiquetas, reglas e instrucciones del juego o juguete" que se vaya a adquirir, y visionar que en el etiquetado aparecen, al menos, el nombre y marca del producto; razón social, y dirección del fabricante o importador o vendedor.
Asimismo, las advertencias de uso y restricciones de edad, en su caso; especificaciones de la potencia máxima; tensión de alimentación que necesita, y consumo energético en juguetes de funcionamiento eléctrico.
"Debe figurar de forma visible la marca CE que acredita que el fabricante o distribuidor garantiza que el juguete cumple con las exigencias esenciales de seguridad contenidas en las normas comunitarias", ha añadido la nota, que ha observado, por último, la obligación de conservar el tícket de compra y pedir la garantía del juguete, si procede.
Para ampliar la información o realizar alguna consulta, ha informado de que se puede acudir a las oficinas municipales de Información al Consumidor (OMIC) o de Atención al Consumidor de las delegaciones provinciales de Desarrollo Sostenible.
