Castilla-La Mancha tiene una enfermera escolar por cada 4.307 alumnos, ya que solamente hay en los centros de Educación Especial y en los colegios públicos en los que estudian alumnos con problemas como espina bífida o lesionados medulares, pero no con enfermedades como la diabetes, la epilepsia o asma.
Estos datos los ha aportado el Colegio Oficial de Enfermería de Toledo, que ha celebrado la primera jornada de enfermedad escolar, a la que han asistido un centenar de profesionales y estudiantes, y en la que se ha reivindicado la enfermera escolar en todos los centros educativos.
En un comunicado, el presidente del Colegio Oficial de Enfermería de Toledo, Roberto Martín, ha señalado que Castilla-La Mancha tiene enfermeras escolares en los centros de Educación Especial y en los colegios públicos con alumnos con problemas de salud como espina bífida o lesionados medulares.
Sin embargo el colegio no está obligado a tener una enfermera escolar en caso de que haya alumnos con diabetes, epilepsia o asma, ha señalado Martín quien ha agregado que cada año aparecen en España mil nuevos casos de diabetes infantil, un 12 por ciento de la población infantil sufre asma y la obesidad infantil se ha multiplicado por diez, con lo que uno de cada cuatro niños de 2 a 17 años tiene sobrepeso.
Según los datos aportados por el Colegio de Enfermería, en Castilla-La Mancha hay 1.503 colegios con 262.729 alumnos y 61 enfermeras escolares, lo que supone una enfermera escolar por cada 4.307 alumnos.
"Su figura es imprescindible en los centros educativos, porque es necesario asegurar los cuidados de salud de los alumnos, porque supone una gran tranquilidad para padres y docentes y, sobre todo, porque somos el colectivo que tiene la capacidad y la formación adecuada y necesaria para administrar cualquier medicamento o realizar cualquier intervención dentro del ámbito escolar para preservar la salud de los alumnos", ha dicho Martín.
