El Sistema de Dependencia de Castilla-La Mancha alcanzó el pasado mes de marzo 52.924 usuarios, la cifra más alta desde que comenzó a funcionar en 2007, con un grado de cobertura del 84,71 por ciento, varios puntos por encima de la media nacional que es del 76,75 por ciento.
Estas cifras situaron a Castilla-La Mancha como la séptima comunidad autónoma con mayor grado de cobertura en el mes de marzo, según datos del Imserso, mientras que en la anterior legislatura ocupaba el penúltimo puesto entre las autonomías, según ha indicado en rueda de prensa la directora general de Atención a la Dependencia de la Consejería de Bienestar Social, Ana Saavedra.
La directora general ha afirmado que este dato "dice mucho" de la gestión que está haciendo el actual Gobierno de Castilla-La Mancha, como lo corrobora también que en el ámbito las personas pendientes de atender, es la séptima comunidad que tiene una menor lista de espera con un 15,29 por ciento de personas frente a un 44 por ciento que había en julio de 2015.
En el desglose por grados, en el grado 2 y el grado 3, los de las personas que requieren un mayor nivel de atención, en julio de 2015 Castilla-La Mancha ocupaba el puesto número 15 de las comunidades autónomas, con un 83,86 por ciento y hoy también está en el puesto número siete con más del 90 por ciento de atención a estos dependientes.
A su vez, en atención a dependientes de grado 1, Castilla-La Mancha ha pasado en estos tres años del puesto 15 al puesto número seis, con un 74,63 por ciento de personas atendidas.
La Consejería de Bienestar Social está relativamente satisfecha de la gestión que se está haciendo del Sistema de Dependencia y de que cada día se vayan incorporando más personas, eso quiere decir que lo estamos haciendo bien, siempre sabiendo que nos queda mucho por hacer y que tenemos que seguir por esta senda.
Así lo reconoció el Observatorio de la Dependencia en el informe de 2017, que indica que Castilla-La Mancha es la segunda comunidad autónoma que mejor está gestionando el Sistema de Dependencia detrás de Castilla y León.
Castilla-La Mancha ha pasado de tener un suspenso de un 4,6 en 2015 a un 8,2 en el décimo octavo Observatorio de la Dependencia de diciembre de 2017, ha destacado la directora general.
Según las cifras que ha dado a conocer Saavedra, en el mes de marzo había en Castilla-La Mancha 52.924 personas usuarias del Sistema de Dependencia, lo que supone un 53 por ciento más que en julio de 2015, cuando se contabilizaban 18.236 usuario.
El total de prestaciones también ha crecido, al contabilizarse 63.979 en marzo, con un incremento del 36 por ciento con respecto a julio de 2015, cuando el número era de 47.160.
También habían descendido notablemente el mes pasado el número de expedientes del Programa Individual de Atención (PIA) que habían pasado de los 26.919 de julio de 2015 a los 7.918 que había en marzo, es decir 19.001 menos, con un descenso del 71 por ciento.
Los mayores incrementos porcentuales se contabilizaron en los usuarios de ayuda a domicilio (que eran en marzo 14.858 con un incremento del 107 por ciento con respecto a los 7.189 que había en julio de 2015) y en los usuarios de teleasistencia, que han pasado de los 4.872 que había en julio de 2015 a 10.005, lo que supone un crecimiento del 105 por ciento.
En marzo habían aumentado también los usuarios de centros de día en un 55 por ciento con respecto a julio de 2015 (hasta llegar a 3.343 usuarios) y los de plazas residenciales, que han pasado de 9.982 en julio de 2015 a 12.236, es decir un 23 por ciento más.
Habían descendido en cambio los perceptores de prestaciones económicas por cuidados del entorno familiar en un 21 por ciento, con 13.050 en marzo frente a las 16.579 que se cobraban en julio de 2015, aunque Saavedra ha aclarado que en un 80 por ciento de los casos se ha debido a que ha fallecido la persona dependientes.
Por otra parte, y a preguntas de los periodistas respecto a las críticas de la Plataforma de Defensa de la Dependencia en Castilla-La Manchad que en la región se está implantando un sistema "de bajo coste", Saavedra ha asegurado que a las personas se las atiende según lo que necesitan y "no pensando si cuesta más o menor".
