Las temperaturas primaverales y el sol que han prevalecido durante los últimos días se mantendrán en la mayor parte de la península a lo largo de la semana, excepto en la zona suroeste de la Península, en Andalucía y Extremadura, donde una borrasca provocará lluvias y un ligero descenso de las temperaturas, especialmente en el Valle del Guadalquivir, durante el lunes, el miércoles y el jueves, según ha informado a Europa Press el portavoz de AEMET, Ángel Alcázar.
Además, un viento fuerte proveniente de Levante afectará al litoral Mediterráneo y, especialmente, a la zona del Estrecho de Gibraltar a lo largo de la semana y se intensificará durante el martes suavizando también la temperatura. Asimismo, el litoral gallego permanece en aviso por fenómenos costeros debido al viento que se desplaza hacia la borrasca situada al sur de la Península.
En el resto de la Península, el clima permanecerá estable y sin cambios destacables en las temperaturas hasta el jueves, con cielos algo nubosos o despejados según el momento del día pero sin precipitaciones. Sin embargo, a partir de este día, la borrasca que afectaba a Andalucía se desplazará hacia el Mediterráneo y zonas del interior y se espera que provoque algo de inestabilidad en esta zona.
Para el fin de semana se prevé que llegue una nueva borrasca que probablemente traerá lluvia e inestabilidad, aunque previsiblemente no lo hará hasta el domingo, y que afectará especialmente al noroeste de la Península. En las Islas Canarias lloverá este lunes en la zona noroeste del archipiélago y, nuevamente, el jueves en la parte más occidental.
Por otra parte, el portavoz de AEMET ha explicado que, durante los cinco primeros meses del año hidrológico (del 1 de octubre al 31 de marzo), los datos de precipitaciones han sido "muy parecidos" al valor normal, un total de 400 milímetros cúbicos frente a los 402 milímetros cúbicos de media.
"El reparto es bastante desigual, hay zonas que superan a las normales en un 50% y otras que no alcanzan el 75% del nivel normal de precipitaciones", ha indicado Alcázar.
Así, las lluvias han sido especialmente copiosas en la franja norte de la Península, desde el norte de Galicia hasta Navarra y buena parte del área mediterránea, en toda la parte oriental de Castilla y León, Madrid, la parte norte de Castilla-La Mancha y el entorno de las sierras de Cazorla y Segura y, sobretodo, en el sur de Navarra, en La Rioja y en el norte de la comunidad valenciana. En cambio, el resto de territorios registran un nivel de precipitaciones por debajo del acostumbrado, y en algunos casos está por debajo del 75%.
