Castilla-La Mancha tiene "una cultura del agua importante" pero la escasez del recurso agravado por las altas temperaturas, la falta de lluvias y el cambio climático está haciendo al Gobierno de Castilla-La Mancha implementar decisiones "para hacer un uso lo más eficiente posible" a través de la innovación y la investigación.
Con motivo de la Semana Mundial del Agua que se está celebrando hasta el 1 de septiembre bajo el lema "Ver lo invisible: el valor del agua", la Agencia Efe ha hablado con el director general de la Agenda 2030 y Consumo de Castilla-La Mancha, Ramón Lara, y con el portavoz regional de Ecologistas en Acción, José Manuel Hernández, para conocer qué pasos se están dando respecto al Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número 6 (agua y saneamiento).
Lara ha dicho que Castilla-La Mancha tiene "una cultura del agua importante" y, además, el Gobierno regional está tomando decisiones "para hacer un uso lo más eficiente posible" del recurso a través de la innovación y la investigación.
"El agua es importante para las personas porque es una cuestión vital, la necesitamos. Es vital también para la economía y para la naturaleza y el clima. Y siendo un recurso escaso, la Agenda 2030 habla de que es un reto a futuro", ha señalado el director general quien ha apuntado que incluso la pandemia ha puesto de manifiesto la importancia del saneamiento y, por ejemplo, del lavado de manos a la hora de prevenir contagios.
Ha relacionado el agua con la economía circular y ha citado como ejemplo el compromiso de aumentar un 10 por ciento hasta el año 2030 la reutilización de las aguas, que también guarda relación con la depuración, y las "buenas prácticas" de distintos sectores en clave de eficiencia y ahorro.
Aunque no sea de su área, ha citado que en agricultura hay cooperativas que "casi están a punto de poder reutilizar agua para regadío".
"TODOS PODEMOS HACER ALGO"
Lara ha agregado que Castilla-La Mancha es "una región que está comprometida, en este sentido, con la Agenda 2030" y ha apuntado que "todos podemos hacer algo" ya que de nada serviría que solamente implementen planes las administraciones públicas.
Para evitar despilfarrar agua, ha citado actos particulares que la ciudadanía puede realizar en su día a día:
- hacer una ducha rápida en vez de bañarse (donde se gastan 200 litros de agua)
- usar el lavavajillas una vez al día consume 25 litros de agua y fregar con el grifo abierto supone 120 litros
- reutilizar el agua de baño de los niños, por ejemplo para fregar los suelos, o el agua de la lluvia para regar plantas
- optar por plantas autóctonas, mejor adaptadas al terreno
- mantener las piscinas llenas todo el año a través de métodos ecológicos en vez de vaciarlas
Según datos de 2020, cada persona consume alrededor de 133 litros de agua al año.
Ramón Lara se ha mostrado optimista de cara al cumplimiento del ODS 6 porque a pesar de errores del ser humano hay herramientas y formación "para enderezar el rumbo".
EL 14 % DEL AGUA CONSUMIDA EN ESPAÑA SE DESTINA A CONSUMO HUMANO
Por su parte, el portavoz regional de Ecologistas en Acción ha manifestado que "el drama no es porque no llueva, el principal problema es la gestión que se hace del agua" en la agricultura, sobre lo cual ha lamentado que "estamos dilapidando el patrimonio".
El consumo doméstico de agua se ha incrementado y, entre otros usos, hay más piscinas, ha señalado Hernández, quien ha lamentado que "como el agua no tiene precio, se tira".
En base a datos del Catastro, en Castilla-La Mancha hay una piscina por cada 50 habitantes, en total 95.434 y en todo el país existen más de 1,2 millones de piscinas, lo que supone una media de una por cada 37 habitantes.
José Manuel Hernández ha dicho que "hay que concienciarse, por supuesto. Está muy bien tener cuidado cuando abres el grifo para ducharte", pero ha criticado que el despilfarro está "en otro sitio", en la agricultura, antes que en el consumo personal.
En la misma línea, la Fundación Global Nature ha indicado que el 14 por ciento "de toda el agua consumida en España se destina a consumo urbano" y aunque ha subrayado que un buen hábito de consumo humano es "importante en la huella hídrica" también ha advertido de que "no es justo achacar al ciudadano la responsabilidad, mientras el modelo productivo no se ajuste al escenario ambiental real".
