La Real Academia de Cultura Gastronómica de Castilla-La Mancha ha echado este lunes a andar con la celebración de la primera reunión de su consejo que tiene como dos ejes fundamentales potenciar "la despensa de calidad y una alimentación saludable" y que confía "tener verdadera velocidad de crucero" en 2019.
Así lo ha avanzando en atención a los periodistas el presidente de la Academia regional, el profesor de la Universidad regional (UCLM) Antonio Mateos, quien ha precisado que el órgano rector de esta Institución "sin ánimo de lucro" la conforman quince personas, diez mujeres y cinco hombres, "sin vinculación directa con el sector agroalimentario".
Mateos ha mantenido que "los objetivos son a medio y largo plazo" y que los primeros pasos será el mantener reuniones con empresarios del sector, cocineros, escuelas de hostelería, pequeños productores, "para potenciar una marca de calidad gastronómica" de la región.
Ha asegurado que "estaremos en sitios estratégicos" dentro de su objetivo final de "ser mediadores en una idea nueva de gastronomía, que no solo es beber y comer, sino cultura".
"Con independencia de que haya productos muy conocidos, queremos visibilizar otros no tan conocidos, así como el papel de la mujer en la gastronomía" en un proceso que ha calificado de progresivo porque "las cosas importantes no se consiguen de inmediato".
De hecho, ha precisado, "a los gobiernos se les dan 100 días y nosotros tenemos que encontrar patrocinadores, ampliar los contactos con instituciones, y vamos a empezar a hacernos visibles este año y cogeremos velocidad de crucero a partir de 2019", ha vaticinado.
Según Mateos, "tenemos que identificar nuestras fortalezas y debilidades para empezar a trabajar en esa línea, sabiendo que somos mediadores, de intentar ser el puente de unión, para a través de concursos, con la presencia de cocineros importantes, dar visibilidad a Castilla-La Mancha y lentamente abonar para recoger".
El presidente de la Academia regional, en este contexto, ha subrayado como la Institución que presidía hasta ahora Carlos Falcó "tenía un ritmo muy lento" y que ha sido la Real Academia Española de la Gastronomía que preside Rafael Ansón la que "nos propuso dar un impulso" hasta el punto que desde el pasado 20 de abril está constituida por quince personas sin ninguna vinculación al sector agroalimentario "para mantener una total transparencia e independencia", ha concluido.
En su presentación oficial, la Academia de Cultura Gastronómica de Castilla-La Mancha, que representará a la región en el foro de academias de cada Autonomía, fue apadrinada por el rector de la UCLM, Miguel Ángel Collado; el presidente de la Real Academia Española de Gastronomía, Rafael Ansón, y el empresario Carlos Falcó.
El nuevo presidente, Antonio Mateos, es doctor en Biología y profesor titular del área de Didáctica de Ciencias Experimentales en la Facultad de Educación de Toledo, dirigió durante quince años el Departamento de Pedagogía y pertenece al Grupo de Investigación en Educación y Sociedad (GIES) de la UCLM.
