Efectivos del Grupo de Intervención en Emergencias Tecnológicas y Medioambientales (GIETMA) de la UME se han desplazado este miércoles a la Central Nuclear de Trillo, en la provincia de Guadalajara, para realizar diferentes ejercicios, que incluyen un simulacro.
Entre el 14 y el 16 de octubre, el GIETMA ha participado en unas jornadas de formación teórica y ejercicios prácticos orientados al conocimiento y comprobación mutua de capacidades de equipos y estrategias entre el Grupo y la central de Trillo, según ha informado esta instalación nuclear en nota de prensa.
El simulacro final celebrado este miércoles ha consistido en la recreación de un terremoto que ha obligado a intervenir a personal de la UME en la central.
Este escenario ha requerido la conexión del grupo electrógeno al Centro Alternativo de Gestión de Emergencias, la utilización de helicópteros para labores de reconocimiento y mediciones, el despliegue de la estación descontaminación móvil, la activación del Plan de Vigilancia Radiológica en Emergencia con envío de datos de medios de medición UME y la ejecución de las estrategias de mitigación de daño extenso.
Este simulacro ha servido para comprobar el apoyo y la colaboración de los militares de la UME con el personal especialista propio de la central.
Durante estas tres jornadas, además se han realizado ejercicios prácticos que han consistido en la mitigación de grandes incendios, la simulación de interconexiones de redes de comunicación y prácticas de descontaminación.
El objetivo de estos ejercicios es el adiestramiento del GIETMA para una intervención en emergencias provocadas por riesgos tecnológicos y medioambientales, fomentar el espíritu y la cohesión de la unidad y poner en práctica y mantener la operatividad del protocolo de colaboración UMEUNESA (FORO NUCLEAR) centrado en esta ocasión en la colaboración con la Central Nuclear de Trillo.
El Grupo de Intervención en Emergencias Tecnológicas y Medioambientales (GIETMA) fue creado el 28 de mayo de 2013 por la UME, para aglutinar en una unidad específica sus capacidades de respuesta a esta clase de emergencias.
Todo ello para optimizar sus recursos y actuaciones en este tipo de intervenciones y para mantener uno de sus compromisos fundamentales, que pasa por la sostenibilidad del medioambiente.
