La junta directiva de la sección de Guadalajara de la Asociación para el Desarrollo de la Serranía Celtibérica (ADSC) ha reclamado la necesidad de invertir en revitalizar las zonas rurales para vertebrar el territorio, "cuya desestructuración ha puesto claramente en evidencia" la pandemia de la COVID-19.
En una nota de prensa, la sección de Guadalajara de la ADSC ha asegurado que las inversiones para revitalizar las zonas rurales "son ahora más necesarias que nunca y ha advertido sobre el "error" que se considere "que invertir en el reequilibrio territorial y en la lucha contra la despoblación sea un coste".
"Desde Serranía Celtibérica seguimos creyendo que, aun en esta situación de crisis que ha traído la pandemia, se ha de entender la apuesta por las zonas rurales en términos de derechos de la ciudadanía a la igualdad de oportunidades y a su propia tierra", ha indicado la asociación, que aboga por "una inversión en cohesión social y territorial que quiere sobre todo hacer evolucionar en fortaleza y sostenibilidad el actual modelo económico y social".
Asimismo, ha reclamado "la necesidad urgente" de recibir los servicios e infraestructuras públicas como el incentivo demográfico para España en estas zonas rurales, "en unas condiciones dignas y similares a las de las zonas urbanas", lo que según la asociación "servirá para revertebrar el territorio, cuya desestructuración ha puesto claramente en evidencia el COVID-19".
Y ha añadido que ahora que la conectividad y las posibilidades del tele-trabajo aparecen como una oportunidad para las zonas rurales, "no se debe olvidar desde las Administraciones, estatal y autonómica sobre todo, que si no se acompaña de inversiones en los servicios públicos básicos, se perderá esta oportunidad de re-equilibrar el territorio de nuestro país y una oportunidad para revitalizar a las zonas rurales".
En este sentido, la secretaria general de la sección de Guadalajara de Serranía Celtibérica, Natalia Díaz, ha afirmado que "estamos convencidos de que cuando nuestros pueblos estén, como las ciudades, dotados de las nuevas tecnologías, habrá más oportunidades de nuevas aplicaciones ocupacionales y crecerá la población".
Díaz ha apostado por intensificar la orientación de las políticas de las comarcas hacia la corrección de desequilibrios demográficos en su ámbito territorial, mediante la garantía de los servicios públicos de competencia local y el fomento del desarrollo económico, social y cultural de carácter endógeno, "dado que una comarca contiene un número de habitantes lo bastante elevado como para poder ir integrando todos los servicios".
