El tercer implicado del crimen de Pioz reconoce que no confesó 'por miedo a Patrick'

- Según desvela este lunes El Español, Víctor Lincoln Araújo fue la primera persona, además del cómplice, que vio las fotos de la familia descuartizada.

- Patrick Nogueira será sometido este martes a una nueva prueba médico forense.

Marvin Henriques Correia (izquierda), con Patrick Nogueira Gouveia, el asesino confeso de la familia de Pioz (Guadalajara)
photo_camera Marvin Henriques Correia (izquierda), con Patrick Nogueira Gouveia, el asesino confeso de la familia de Pioz (Guadalajara)

Según desvela este lunes el diario que dirige Pedro J. Ramírez, El Español, en una información del periodista Brais Cedeira, Víctor Lincoln Araújo fue la primera persona en ver las imágenes, los vídeos y los selfies del cuádruple crimen de Pioz en septiembre.como ya adelantó El Español, se encontró con la masacre cuando le pidió a su amigo Marvin Henriques Correia un teléfono móvil para sustituir el suyo estropeado. Al indagar en él, descubrió los cuerpos descuartizados de la familia de Guadalajara. En lugar de delatar el hecho, optó por el silencio. Según consta en la declaración que el joven hizo ante la policía brasileña, no delató a su amigo "por miedo" a que Patrick, el asesino confeso, cargara contra él.

En una declaración muy corta, de pocos minutos, ante la policía brasileña, pocos días después del 18 de septiembre, cuando se conoció el caso en España, Víctor relató cómo se hizo con los vídeos y las fotografías al tener el móvil del cómplice y cómo los distribuyó a su círculo más cercano. Víctor se convirtió, sin quererlo, en el tercer implicado en el crimen de Pioz, aunque su responsabilidad es mucho menor que la de Patrick Nogueira Gouveia, el asesino. Pese al tiempo que pasó en silencio encubriendo el crimen, su testimonio posterior resultó clave para que la policía brasileña pudiera cerrar el círculo de los horrores en Guadalajara, prosigue la información que este lunes publica El Español.

Según ha podido saber El Español, Víctor no vio, como Marvin, las fotos en tiempo real, cuando se estaba cometiendo el asesinato. El joven manifestó en su declaración que fue en septiembre cuando se hizo con las fotografías, cuando llegó el móvil de Marvin a sus manos. El día 20 de septiembre, dos días después de que el caso estallase y trascendiese la noticia a Brasil, Patrick volvió a casa, huyendo de lo sucedido. Víctor, en ese momento todavía no había prestado declaración ante los jueces, pero sí que tenía en su poder las imágenes.

No tardaron mucho en verse las caras por entre las calles de Joao Pessoa. Patrick se encontró con él, uno de sus viejos amigos, al que hacía más de seis meses que no le veía, desde que se marchó a España buscando la fortuna futbolística. Se saludaron como siempre, hablaron un rato y después Víctor se alejó. Fue la única ocasión, según ha podido conocer El Español, en que ambos, asesino y tercer implicado, se vieron.

Semanas después, cuando la investigación saltó a Brasil y Patrick volvió a España para ser detenido, fue la chica de la pandilla, cuyo nombre todavía no ha trascendido, quien acudió a la policía. Se hicieron con la pista de Víctor. Hablaron con su padre y este llevó a su hijo ante los policías. Su declaración es muy corta, escueta y apenas exhaustiva. “Se nota que no iban a por él”, confirma a El Español fuentes internas del caso.

NUEVA PRUEBA MÉDICO FORENSE

Por otra parte, el asesino confeso del cuádruple asesinato, Patrick Nogueirá, volverá de nuevo este martes a Guadalajara para continuar con la práctica de las pruebas médicas necesarias con el fin de determinar su estado metal de salud.

En este caso en concreto, según han confirmado a Europa Press fuentes vinculadas a la investigación, el presunto criminal se sometería a una nueva prueba médico forense que se sumará a la prueba psicológica practicada el pasado viernes.

Se trata de una prueba que practican expertos en medicina legal para tratar de determinar si el presunto asesino tiene algún tipo de patología que le impida conocer "la realidad" de lo que hace, según las mismas fuentes.

Por otra parte, desde Instituciones Penitenciarias se ha vuelto a pedir el traslado del interno de la prisión de Alcalá-Meco a otra cárcel, alegando razones de seguridad. Esta petición ha sido comunicada al Juzgado número 1 que lleva el caso para que valore si existe alguna razón considerable para no tenerlo en cuenta.

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