El servicio de Rehabilitación del Área Integrada de Guadalajara ha atendido en una consulta específica de covid, creada por las secuelas que presentaban muchos pacientes tras la enfermedad, a más de 150 pacientes desde su puesta en marcha en el verano de 2020.
Estas secuelas, ha señalado la doctora Rosario Hernández Alfaro, médico rehabilitadora del Hospital Universitario de Guadalajara, van desde lesiones de hombro, principalmente por la posición de los pacientes intubados, a problemas para hablar y comer debido a los daños en las cuerdas vocales por la intubación, pasando por pérdida de fuerza muscular, afectación pulmonar o lesiones neurológicas, como pies equinos que dificultan la marcha y autonomía de los pacientes.
“Se trata de atender las secuelas que ha dejado la covid-19 mediante rehabilitación motora, respiratoria o de la deglución, tanto en pacientes que precisaron ingreso hospitalario como en otros pacientes que pasaron la enfermedad sin haber sido ingresados, que en ocasiones llegan en una situación incluso peor que la de los pacientes que requirieron ingreso”, ha explicado en un comunicado de la Gerencia de Guadalajara.
Se realiza una valoración integral del paciente tras la cual se prescribe un tratamiento individualizado para realizar de manera ambulatoria en las diferentes áreas terapéuticas de Rehabilitación como son Fisioterapia, Logopedia y Terapia Ocupacional, o se le remite para su valoración por parte de otros servicios como Neumología, Neurología, Cardiología o Dermatología, entre otros.
Para todo ello, el equipo implicado en esta consulta específica de Rehabilitación post covid cuenta con médicos rehabilitadores, personal de enfermería, fisioterapeutas, logopedas, terapeutas ocupacionales, auxiliares y celadores, entre otros, que trabajan de manera coordinada entre sí y con otros servicios del hospital.
Los pacientes son remitidos a Rehabilitación desde otros servicios hospitalarios y también por parte de los profesionales de Atención Primaria.
Los pacientes suelen presentar una afectación psicológica y en muchos casos precisan apoyo para atender el estrés postraumático y la frustración que surge cuando la recuperación avanza más despacio de lo esperado.
En este sentido, la doctora Hernández ha dicho que “la mayoría de pacientes sí recupera funcionalidad pero hay una minoría en los que persiste una fibrosis pulmonar, así como lesiones nerviosas asociadas y dificultad para respirar y caminar”.