El Juzgado de Instrucción encargado de la investigación abierta por el incendio el pasado 26 de agosto en la planta de residuos tóxicos de Chiloeches, ha citado a declarar este lunes, 24 de abril, a nuevos testigos y a uno de los investigados que no quiso declarar inicialmente.
Según han señalado a Europa Press fuentes vinculadas al caso, aunque uno de los investigados por esta causa renunció inicialmente a prestar declaración, finalmente lo hará este lunes, así como también está previsto que declare el secretario del Ayuntamiento de la localidad a petición de una de las partes implicadas en el caso.
En la investigación, que se abrió el pasado noviembre, hay de momento diecinueve personas físicas investigadas y tres jurídicas, entre ellas algunos cargos y ex altos cargos de la Junta de Castilla-La Mancha, tanto de la etapa en la que gobernó María Dolores de Cospedal como de la actual, el que fuera alcalde de Chiloeches, César Urrea, y también las empresas Kuk Medioambiente, Layna y Salmedina.
Entre las imputaciones que se atribuyen a los investigados están las vinculadas con delitos contra el medio ambiente, pertenencia a grupo criminal y falsedad documental.
Por otra parte, este mismo 24 de abril se cierra el plazo otorgado a las partes para solicitar nuevas diligencias de investigación con respecto al caso.
Hace aproximadamente un mes, desde el Ayuntamiento se ponía en conocimiento de la Guardia Civil el robo de chatarra, supuestamente contaminada, de la planta donde tuvo lugar el incendio, una denuncia que llevaría también al Juzgado a "advertir" a la Subdelegación del Gobierno y a la Delegación de la Junta en Guadalajara a adoptar medidas para evitar nuevos robos.
Según ha confirmado Europa Press de fuentes de la Dirección General de Medio Ambiente en Guadalajara, desde aquí se ha solicitado al Juzgado que especifiquen qué tipo de medidas debería aplicar para ello tras indicar que ellos ya habían instado previamente a la empresa a que se llevasen el material, sin que aún lo hayan hecho.
