El incendio de Guadalajara salta a Segovia, arrasa 3.000 hectáreas y obliga a desalojos

Imagen de una de las columnas de humo producida por el incendio forestal en el Pico del Lobo, en Peñalba de la Sierra (Guadalajara) - EFE/Nacho Izquierdo.
El incendio declarado hace una semana en Peñalba de la Sierra (Guadalajara) ha arrasado ya más de 3.000 hectáreas —unas 400 en Segovia— y ha obligado a desalojar varias localidades. La lluvia ha dado un respiro al operativo, pero Castilla-La Mancha ha pedido más medios al Ministerio mientras se consolidan las líneas de control.

El fuego iniciado hace una semana en Peñalba de la Sierra (Guadalajara) se ha propagado esta madrugada a la provincia de Segovia por efecto de un viento del sur más intenso de lo previsto. Ante el agravamiento, se han decretado nuevos desalojos y Castilla-La Mancha y Castilla y León han creado un Mando Unificado para coordinar la extinción. El incendio sigue activo en nivel 2, ha superado ya las 3.000 hectáreas calcinadas y la irrupción de la lluvia ha dado un respiro a los equipos de extinción.

El fuego se extiende a Segovia y obliga a evacuar Riofrío y La Pinilla

El gran incendio forestal declarado hace siete días en la Sierra Norte de Guadalajara ha dado un paso más en su evolución y ha alcanzado ya la provincia de Segovia, donde ha obligado a tomar medidas drásticas de protección a la población.

Durante la madrugada, las llamas alcanzaron el término municipal de Cerezo de Arriba tras reavivarse el flanco norte del incendio, impulsado por los fuertes vientos del sur asociados a la borrasca extratropical del exhuracán Gabrielle. Según Infocam, este viento fue “más fuerte de lo esperado”, lo que abrió la línea defensiva y favoreció la entrada de las llamas en territorio segoviano.

El viceconsejero de Medio Ambiente, José Almodóvar, detalló que el salto a Segovia se produjo el sábado por la tarde en un punto “relativamente pequeño”, pero que al cruzar la ladera segoviana el fuego se abrió y generó un nuevo sector del incendio.

Como consecuencia, se declaró un incendio de Índice de Gravedad Potencial (IGR) 2, lo que supone amenaza seria para la población y exige medidas de socorro inmediatas. Durante la noche se procedió a la evacuación de la urbanización de La Pinilla, mientras que en la mañana de este domingo se decretó el desalojo de Riofrío de Riaza, localidad que se encontraba celebrando sus fiestas patronales, con un número de visitantes superior al habitual.

Los vecinos fueron dirigidos al Polideportivo de Riaza, habilitado como centro de acogida, aunque la mayoría optó por refugiarse en casas de familiares y amigos. La UME ya utilizaba estas instalaciones como base operativa para su despliegue en la zona.

Según los responsables del operativo, la superficie afectada en el sector segoviano ronda ya las 400 hectáreas, que se suman a las arrasadas en Guadalajara hasta alcanzar unas 3.000 hectáreas totales.

Mando Unificado entre dos comunidades autónomas

El avance de las llamas más allá de los límites provinciales ha obligado a reforzar la coordinación. Los gobiernos de Castilla-La Mancha y Castilla y León han constituido un Mando Unificado de Extinción, con el que se busca tomar decisiones conjuntas en tiempo real y reforzar la cooperación entre dispositivos.

El viceconsejero de Medio Ambiente de Castilla-La Mancha, José Almodóvar, explicó tras la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) que la prioridad es “controlar el perímetro del incendio trabajando conjuntamente”.

El mando se coordina a través de videoconferencias recurrentes, ya que la orografía obliga a que cada región mantenga sus propios puestos de mando separados.

Almodóvar subrayó que la zona tiene una “topografía complejísima” y que la vegetación dominante —piornos y brezos— arde con gran facilidad y rapidez, dificultando desde el principio los trabajos de extinción.

No queda otra más que seguir trabajando conjuntamente para tratar de controlar el perímetro de este incendio, seguir avanzando y transmitir a la población que es imprescindible respetar las medidas de seguridad”, reiteró.

Balance provisional: más de 3.000 hectáreas calcinadas

Las estimaciones oficiales elevan la superficie afectada a más de 3.000 hectáreas de alta montaña, consolidando este incendio como uno de los más graves registrados en la Sierra de Ayllón en los últimos años.

La magnitud del dispositivo desplegado se mantiene muy elevada. Según los datos técnicos actualizados, participan actualmente 81 medios y 318 personas:

  • 23 medios aéreos con 27 profesionales.

  • 53 medios terrestres con 260 brigadistas, retenes y autobombas.

  • 5 equipos de dirección y coordinación con 9 responsables técnicos.

  • 22 efectivos internos de apoyo.

En total, desde el inicio del incendio el pasado 21 de septiembre, se han movilizado ya 185 medios y 896 personas, con un balance acumulado de:

  • 56 medios aéreos y 79 profesionales.

  • 121 medios terrestres y 681 efectivos.

  • 8 medios de coordinación con 16 responsables.

  • Además de personal interno y de apoyo.

De ellos, unas 300 personas trabajan solo en la parte de Castilla-La Mancha, según ha concretado el viceconsejero Almodóvar.

Se trata de recursos de Infocam, MITECO, la UME y de los servicios autonómicos de Castilla y León y de la Comunidad de Madrid.

Infocam ha querido agradecer expresamente la labor de todos los equipos y personas que participan en las tareas de extinción en condiciones muy adversas.

La lluvia da un respiro y se piden más medios al Ministerio

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha solicitado al Ministerio refuerzos adicionales para consolidar los avances. Desde el Cecopi instalado en Campillo de Ranas, el director de la emergencia, Juanjo Fernández, señaló que la irrupción de la lluvia supone una ayuda importante:

“Es una ayuda, pero no podemos confiar todo a la lluvia”, afirmó, explicando que el agua caída ha mojado los combustibles y dificulta la propagación del fuego.

Fernández matizó que la lluvia puede reducir la intensidad de los frentes y ayudar en los sectores menos activos, pero no apagará los frentes más intensos. Además, es más eficaz en combustibles muertos (hojarasca, pastos) que en combustibles vivos, que reaccionan de forma diferente. Advirtió también de que persiste el riesgo de reproducción en tocones y en el mantillo del suelo, lo que podría reactivar llamas en uno o dos días si suben las temperaturas.

El viceconsejero de Medio Ambiente, José Almodóvar, añadió que tras el salto del fuego a Segovia se han tenido que redistribuir medios y se ha realizado “una petición extraordinaria al Ministerio para pedir nuevas brigadas”.

Almodóvar precisó que los trabajos se concentran en el sector este, con brigadas terrestres, la UME y maquinaria pesada, dentro del plan de contingencia diseñado para aprovechar la ventana que da la lluvia.

El viceconsejero anunció además que la situación será reevaluada esta tarde, con la posibilidad de que los vecinos de Peñalba de la Sierra y Cabida, desalojados desde el viernes, puedan regresar a sus casas:

“A las cinco o seis veremos la posibilidad de que puedan volver a sus casas, con el compromiso de que eviten desplazamientos innecesarios porque sigue habiendo mucho trasiego de medios, nodrizas y camiones góndola con maquinaria pesada. Es muy importante que la gente esté tranquila en sus casas porque vamos a seguir trabajando”, afirmó.

Restricciones y avisos a la población

El incendio permanece en Nivel Operativo 2, lo que implica coordinación con medios estatales y riesgo para poblaciones y bienes. A este nivel de alerta se suman varias medidas preventivas que afectan tanto a vecinos como a visitantes:

  • Peñalba de la Sierra y La Cabida continúan evacuadas desde hace varios días, mientras que en Segovia se han sumado Riofrío de Riaza y La Pinilla.

  • El Hayedo de Tejera Negra, una de las joyas naturales de la Sierra Norte, permanece cerrado al público.

  • Se mantiene la recomendación expresa de no circular ni realizar actividades recreativas en el Parque Natural de la Sierra Norte, tanto por seguridad como para facilitar el trabajo de los equipos de extinción.

  • El sistema de alerta masiva ES-Alert ha enviado mensajes a móviles de vecinos y visitantes para advertir de evacuaciones y reforzar las recomendaciones de autoprotección.

“Pedimos a la población que evite circular, hacer senderismo o acercarse al fuego. Es imprescindible dejar trabajar a los medios de extinción en condiciones seguras”, subrayó Almodóvar.

Una semana de lucha contra un incendio de alta montaña

El origen del incendio se remonta al domingo 21 de septiembre a las 08:13 horas, cuando se detectó un foco en el Pico del Lobo-Cerrón, en el municipio de El Cardoso de la Sierra (Guadalajara). Se trataba de un incendio forestal de matorral leñoso no arbolado, en un paraje de alta montaña especialmente escarpado, lo que dificultó desde el inicio el uso de maquinaria pesada y obligó a depender de brigadas manuales y medios aéreos.

Los primeros días, las llamas avanzaron con rapidez y arrasaron unas 700 hectáreas, lo que llevó a la Junta de Castilla-La Mancha a declarar el Nivel Operativo 2 y a solicitar la intervención de la UME.

A lo largo de la semana, el incendio fue sumando hectáreas y complicaciones:

  • Se alcanzó un perímetro cercano a los 30 kilómetros, con focos muy difíciles de atacar.

  • Se produjeron incidentes en los medios aéreos, como el daño sufrido por un avión anfibio en una maniobra de descarga, aunque sin heridos.

  • La meteorología aportó un respiro temporal con descensos de viento, pero la situación volvió a empeorar con el paso de la borrasca asociada al exhuracán Gabrielle.

Antes del salto a Segovia, el incendio ya había arrasado 2.400 hectáreas en Guadalajara y mantenía en vilo a las localidades de la Sierra Norte.

Críticas a la gestión y debate político

A medida que el incendio se ha prolongado, también han crecido las críticas a la gestión por parte de sindicatos y partidos de la oposición. Entre las principales quejas figuran:

  • La falta de efectivos en retenes forestales, con acusaciones de que se habían retirado unidades en jornadas clave.

  • Denuncias por falta de coordinación inicial y retraso en la petición de ayuda a la UME.

  • Quejas sobre la dotación de medios aéreos, considerados insuficientes en los primeros días pese a la complejidad del terreno.

La Junta de Castilla-La Mancha ha defendido que el dispositivo ha actuado con todos los medios disponibles y que la singularidad del terreno ha hecho de este incendio un desafío inédito. Aun así, el debate político y sindical se ha intensificado conforme han pasado los días y las llamas han alcanzado la vecina provincia de Segovia.

Perspectivas: días decisivos

Las previsiones meteorológicas no invitan al optimismo inmediato: los vientos intensos y cambiantes en montaña siguen siendo un factor crítico, aunque la lluvia caída en las últimas horas ha frenado parcialmente la propagación y permitido un respiro a los equipos.

Las autoridades advierten de que la extinción podría prolongarse varios días más. El Mando Unificado continuará dirigiendo un operativo reforzado que afronta una carrera contrarreloj para evitar que el incendio siga ganando terreno en dos provincias y siga amenazando a nuevas poblaciones.

El objetivo inmediato, según los responsables, es aguantar y consolidar las líneas de control en todos los sectores, especialmente en el este, y aprovechar la ventana meteorológica que ha abierto la lluvia.