Una técnico del servicio jurídico del Centro de la Mujer de Cifuentes (Guadalajara) ha asegurado que J.M.B.V., el hombre que presuntamente acabó con la vida de su pareja que estaba embarazada de siete meses en octubre de 2013 en la localidad, rompió con su anterior pareja, también embarazada, por tener problemas similares a los que tuvo posteriormente con la fallecida y acudió al Centro porque se encontraba muy afectada emocionalmente.
La técnico, una de las testigos citadas en la vista que se sigue desde este jueves en la Audiencia Provincial de Guadalajara, contra J.M.B.V., ha declarado además que el acusado le dijo que no iba a reconocer al niño de esa anterior pareja y desapareció del pueblo.
También han prestado declaración el exmarido de la víctima, así como los hijos de ella, que lo han hecho por videoconferencia, desde la Biblioteca de la Audiencia Provincial de Guadalajara.
La última persona en declarar ha sido la profesora particular de los niños, quien, a preguntas de las partes, ha asegurado que el día que supuestamente ocurrieron los hechos, cuando fue a dar clase, la víctima no estaba en casa y que la recibió el acusado, quien le dijo que no impartiera clase en el merendero, como le había indicado que lo hiciera la madre de los niños, pues se había roto un espejo y que la diera en el salón.
Por último, la testigo, se ha referida a la víctima como sonriente y tranquila, y ha asegurado que cuando le recibió el acusado le notó "normal", y que había otra persona en la cocina, aparentemente comiendo "pero no comía" y en una posición sospechosa.
Otro de los testigos que ha prestado declaración, ha sido el amigo del acusado al que llamó para que recogiera a los niños del colegio el día de los hechos, pero, si bien en su primera declaración éste manifestó que el procesado le había llamado el día anterior para pedirle ese favor, éste jueves en la sala, él ha manifestado que lo había hecho tan solo horas antes de la jornada en la que supuestamente desapareció la víctima.
Este viernes a partir de las 9.00 horas el juicio continuará con la declaración de nuevos testigos, de unos hechos para que el Ministerio Fiscal solicita para el acusado 15 años de prisión por los delitos de homicidio y aborto y las acusaciones particulares elevan las penas entre 20 y 30 años, considerando los delitos de asesinato y aborto, entre otros.
