La Asociación Guada-Acoge ha reclamado este viernes en Guadalajara la necesidad visibilizar y luchar contra la trata de seres humanos, especialmente con fines de explotación sexual, algo que. según la técnico Rousiane Souza, también se detecta en Castilla-La Mancha, y por tanto, en esta provincia.
Acompañada del vicario episcopal para la Pastoral Social, Braulio Carlés, y con motivo de la celebración, el próximo 8 de febrero, de la Jornada Mundial contra la Trata de Seres Humanos, Rousiane ha reconocido que se trata de un fenómeno que "también pasa aquí, en Guadalajara y en Castilla-La Mancha".
Para Guada-Acoge se trata de un fenómeno, a menudo invisible pero que genera mucho dinero, y contra el que hay que luchar porque también conlleva "sufrimiento y vulneración de derechos", ha dicho Souza a los medios.
Desde esta organización han lamentado la falta de dispositivos para afrontar tanto la explotación sexual como la laboral, que suele afectar también a niños.
Por lo que respecta a Guadalajara ha hablado de un único proyecto de atención socio-jurídica y de sensibilización, pero sí se ha referido al trabajo que realizan en otras provincias de la región otras organizaciones como Médicos del Mundo, que cuentan con dispositivos en Toledo y en Ciudad Real "que intervienen en los clubes de carretera".
Pero para Guada-Acoge, si bien en esta lucha es importante el apoyo de las administraciones, también han querido aludir al papel del cliente, en el caso de la explotación sexual, y la importancia de que diga "no" como una manera más de acabar con el fenómeno.
Carlés, como presidente de ACCEM en la región, ha lamentado la falta de ayuda a la cooperación internacional, pidiendo más apoyo a los gobiernos para trabajar frente a un problema que --según ha precisado-- afecta de manera especial a la población inmigrante.
