El cardenal franciscano y arzobispo emérito de Sevilla, Carlos Amigo, encargado de realizar el pregón de Semana Santa en Guadalajara, ha animado a disfrutar de este tiempo "en familia, con amor y llenos de misericordia".
Acompañado del obispo de la diócesis de Sigüenza-Guadalajara, Atilano Rodríguez, y del alcalde de Guadalajara, Antonio Román, el cardenal Amigo ha dirigido sus palabras a cientos de fieles que han llenado la Concatedral de Santa María de Guadalajara.
"Las celebraciones de Semana Santa son una síntesis entre creencia y cultura que el pueblo siente como suyo en patrimonio religioso compartido", ha señalado al referirse a los actos de estos días.
Para el arzobispo emérito de Sevilla, "el amor y la misericordia deben presidir la vida del cristiano" que tiene la obligación de "acoger al refugiado, integrar al que llega y trabajar en favor de la paz".
Asimismo, ha defendido a la familia como "escuela de vida y amor y transmisora de valores imperecederos" que debe contar con los medios necesarios "de estabilidad económica y social y educación" para cumplir con su misión socializadora.
En su pregón de Semana Santa, Carlos Amigo ha animado a la Iglesia a participar del diálogo entre religiones y "estar abierta al encuentro con todos los hombres y las culturas" pero "siempre fiel al mensaje de Cristo".
Antes de la celebración del pregón, la corporación municipal, acompañada del cardenal Amigo y el obispo Atilano Rodríguez han descubierto un grupo escultórico dedicado a la Semana Santa junto a la Concatedral de Santa María.
Se trata de dos nazarenos, uno adulto y otro niño, elaborados por el escultor Oscar Albariño que, según ha señalado el alcalde, Antonio Román en la presentación, "quiere exaltar la importancia de la Semana Santa en Guadalajara, como solemne expresión de arte, tradición y religiosidad".
