Según recoge Diario Gol, Iker Casillas lleva meses preparándose para el próximo mes de marzo. Es para entonces cuando se someterá a una serie de pruebas que determinarán si puede volver o no a jugar en el fútbol de élite. Una opción para la que ha trabajado muy duro últimamente, pero que empieza a dudar que pueda ser una realidad. Y ya ha trazado un plan B.
El cancerbero del Oporto sufrió un infarto el pasado mes de mayo que le obligó a alejarse de los terrenos de juego. Y desde el club le ofrecieron ejercer como enlace entre la plantilla y la directiva mientras no pudiera volver a jugar.
Iker Casillas trabaja para volver a jugar
Meses después y cuando ya estaba fuera de peligro, se puso manos a la obra para regresar al primer equipo portugués. Y los expertos lo emplazaron al próximo mes de marzo para examinarle y tomar una decisión en cuanto a su futuro.
La ilusión de Iker pasa por volver a jugar. Es el máximo objetivo que se ha fijado en los últimos meses. Él mismo ha compartido en su cuenta de Instagramalgunas imágenes en las que se le veía ejercitándose en el gimnasio para ponerse en forma.
Pero el propio Casillas es consciente de que el camino puede torcerse. Y que es muy posible que los expertos le recomienden colgar los guantes. Y de ahí la decisión que ha tomado en las últimas horas. “Ha pasado esto”, avisan desde Madrid.
Iker Casillas pone en marcha su plan B
Según ha anunciado la cadena SER, Iker habría comunicado al Consejo Superior de Deportes (CSD) sus intenciones de presentar candidatura a la presidencia de la Real Federación Española de Fútbol como sustituto de Luis Rubiales. Parece que el meta ha puesto en marcha su plan B para ampliar opciones de futuro.
Cabe decir que esta misma emisora a anunció hace unas semanas la posibilidad de que Casillas estuviera pensando en presentarse como aspirante al cargo. Pero los rumores se diluyeron con la aparición de nombres como los de Mariano Rajoy o Albert Rivera. Ahora, en cambio, parece que la presentación de su candidatura es un hecho.
Un posible viaje de vuelta a Madrid con el que hace tiempo que sueña Sara Carbonero. La de Corral de Almaguer está encantada con la decisión de Casillas y le falta tiempo para hacer las maletas y preparar la mudanza.
Tanto por poder regresar a la capital de España, donde volverá a estar cerca de los suyos y de las oportunidades de trabajo, como, en caso de ganar, ahorrarse la preocupación y el sufrimiento de ver a su marido jugándose la vida en los campos de fútbol. Lo prefiere tranquilito en los despachos.
