Según informa Juanra López en VANITATIS, a tensa entrevista que mantuvieron el pasado fin de semana María Teresa Campos y Jorge Javier Vázquez en 'Sábado Deluxe' se ha convertido en uno de los principales argumentos informativos de 'Sálvame' en los últimos días, habida cuenta de la delicada situación que atraviesa la relación entre el presentador y las Campos. Fuentes cercanas a la periodista malagueña nos dicen que su presencia en el espacio podría deberse a su necesidad de liquidez, de ahí la incomodidad de ella, en un momento en el que sus hijas se han visto envueltas en distintas polémicas sobre las que ella no quiso pronunciarse.
"Además de los gastos que tiene con su casa y mantenerse, más las ocasiones en las que pueda echar una mano a sus hijas, tiene a nómina a las personas de servicio, a su fiel Gustavo, que ha estado trabajando con ella desde que apenas era mayor de edad, y a su secretaria de toda la vida, Sonsoles, con lo cual el montante al que tiene que hacer frente todos los meses es elevado", nos aseguran. Aunque no podemos pasar por alto que a principios de 2017 vendió un lujoso ático que tenía en Pozuelo por 1.300.000 euros, lo que es una enorme inyección económica (mantenía una enorme deuda de casi un millón con el Banco Popular), y también podría haberse deshecho de una de sus propiedades en Málaga, como veremos más adelante, por lo que habría que pensar que su situación económica es desahogada. Otra cuestión son los gastos a los que tiene que hacer frente en su vida cotidiana.
Una de las incógnitas que surgen es en qué estado se encuentran sus finanzas, ya que pocas estrellas televisivas han cobrado sueldos como los que se le adjudicaban cuando presentaba 'Día a día' en Telecinco, el espacio con el que arrollaba a la competencia en términos de audiencia y por el que se dice que llegó a cobrar 500 millones de pesetas, tres millones de euros, por 200 programas. O de los seis millones de euros anuales que le atribuía la revista '¡Hola!', con la que siempre ha mantenido una excelente relación profesional y era una fuente muy autorizada para hacer aseveraciones de estas características. No en vano hace tan solo unas semanas protagonizó una muy comentada portada con su nieta Alejandra Rubio, previsiblemente muy bien remunerada.
Cifras de vértigo
No podemos tampoco pasar por alto las cifras millonarias que se embolsó en su fallido paso por Antena 3 y que se pusieron sobre la mesa cuando ganó su batalla a Hacienda en 2017 (le reclamaban 800.000 euros). En dos sentencias, la Audiencia Nacional le daba la razón y desestimaba que hubiera simulado la creación de una sociedad para eludir impuestos. En una de ellas, en febrero de ese año, a la que tuvo acceso Vanitatis, detallaba que en 2004, cuando Antena 3 fichó a Campos para ponerse al frente de un nuevo magacín matinal, la empresa familiar pactó cobrar tres millones al año más 30.000 por cada programa especial que presentara.
María Teresa Campos no cobraba directamente un salario, sino que utilizaba una productora, Teteco SL, que a su vez era accionista de Producciones Lucam. Aunque ingresó 3,45 millones, en 2006 Producciones Lucam solo pagó a Campos 460.897 euros ese año, que es lo que declaró por IRPF. Hacienda lo consideró un fraude, pero, sin embargo, ella logró ganar la batalla en los tribunales. Las sentencias referidas determinaron que Producciones Lucam sí tenía medios materiales y gente contratada y, por lo tanto, no era una sociedad instrumental para reducir la factura fiscal. "Esta victoria en los tribunales fue muy importante para María Teresa Campos y evidenciaba también que detrás de ella había personas y gastos muy importantes que pudo acreditar", nos dicen nuestras fuentes.
Demasiado generosa, según algunos
Respecto al estilo de vida de María Teresa Campos, nos dicen que "el problema es que ha sido muy generosa y no ha tenido asesores para realizar las inversiones adecuadas. Además, proyectos como su disco con Bigote o la línea de zapatos que lanzó no funcionaron. Sin embargo, siempre le ha ido profesionalmente bien. Primero en la radio, luego en televisión, también como escritora... En sus mejores momentos, por ejemplo, cuando iba al hotel Coral Beach de Marbella, pagaba los gastos de todos los que estaban con ella. Ha tenido palmeros que se han aprovechado de ella y se han alejado cuando ya no era tan poderosa. También ha sido de las pocas famosas que ha pagado por la ropa, no se ha aprovechado de su nombre para conseguirlo gratis. Ella iba a la tienda de Elena Benarroch, que no es precisamente barata, y pagaba a tocateja. No como otros... Por ejemplo, cuando iba a Nueva York, se volvía con varios Manolo Blahnik para ella, para sus hijas y para alguna amiga. Siempre ha sido muy desprendida".
