Según recoge Manuel Román en CHIC, es Paco León uno de los más populares actores, asimismo guionista, director y productor de sus películas que en 2016 no tuvo rubor alguno en proclamar que es bisexual. Ha estado diez años unido a la guionista y realizadora catalana Anna R. Costa, padres de una niña, Manuela, nacida en 2010. Con aquella compartió tanto cama como producciones cinematográficas, la más conocida Arde Madrid, acerca de las andanzas madrileñas de Ava Gardner durante los años 50 y parte de los 60. Paco es, amén de un divertido personaje, alguien que dada su condición sexual ha gustado siempre alternar parejas. Cuando se fue a vivir con Anna ya roneaba con un novio. Y ha llegado a la conclusión ahora, después de haber declarado hace tiempo que Anna era una mujer con quien quería envejecer, que quien llena su corazón es un decorador residente en Marbella. A ver cuánto le dura esa nueva sensación amorosa, en el supuesto también de que una nueva mujer le haga tilín.
Francisco (Paco) León Barrios nació hace cuarenta años en Sevilla, cumplidos a primeros del pasado octubre. Su padre, Antonio, tabernero, muy aficionado al flamenco, huidizo para los periodistas, pues quiere vivir en el anonimato. Si acaso se conocen fotografías suyas son de cuando era joven, facilitadas por él mismo. La madre, en cambio, es farandulera, Carmina. Le gusta aparecer en los reportajes junto a sus hijos (Paco y la también actriz, María). Habla con los codos con repajolera gracia sevillana. Su personaje de marujona en Carmina o revienta, la película que dirigió Paco, la convirtió en muy popular en toda España. La secuela, Carmina y amén, tuvo menor recorrido en los cines.
Hay que reconocer en Paco León a un cineasta ingenioso, tanto cuando interpreta, escribe o dirige un filme, el último de ellos, Rainbow, se presentó en el reciente Festival de San Sebastián, sobre el argumento de El mago de Oz, que ha producido Netflix y de momento no parece vaya a exhibirse en salas cinematográficas, sino en televisión de pago. Nuestro personaje se dio a conocer precisamente en la pequeña pantalla a partir de 2003, con Homo zapping, siguió dos años después con Aida, junto a Carmen Machi, donde personificaba a Luisma, un tonto del barrio que se había rehabilitado de sus adicciones. Para la gran pantalla, Paco León ha obtenido muy aceptables críticas y respuesta del público en taquilla con No lo llames, llámalo X, Kiki, el amor se hace, donde debutó como director, Toc-Toc y algunas otras en clave de comedia urbana y gente estrafalaria.
La vida de Paco León tiene muchos ingredientes desde que naciera en una humilde barriada sevillana conocida como "de las tres mil viviendas". Superó su vida familiar en condiciones nada boyantes y siempre quiso volar, escapándose más de una vez de casa, en pos de alguna aventura. Ahora no tiene problemas para llegar a fin de mes, le sonríe la vida en su profesión, y ya queda dicho que su vida sentimental la comparte unas veces con alguna mujer y otras con un hombre. Así es feliz, probándolo todo.
