Ha sido a raíz de que una revista del corazón llevara esta semana a su portada una imagen de ambas que ha dado ese giro radical, aunque nunca había publicado el rostro de Lola para proteger su intimidad, y las fotos siempre eran muy cuidadas para que no se la pudiera reconocer.
Tal como explica la presentadora en un post de su perfil oficial, "he decidido borrar todas las fotos que había publicado con mi hija en este muro de Instagram. En ninguna de ellas se le veía el rostro porque siempre os conté que había decidido protegerla. Eran fotos bonitas donde compartía con vosotros mis sentimientos como madre".
Y es que reconoce que se asustó al ver a su bebé en la portada de una revista "con un pixelado tan tenue que se la reconoce". Además, aprovecha señalar que todo esto le ha llevado a reflexionar sobre el tema de la exposición de su hija y envía un rotundo mensaje para que esta situación no vuelva a darse: "A partir de ahora os pediría, compañeros, que respetarais su imagen porque es una menor. Muchas gracias".
Dicho y hecho, después de comunicar esta decisión a sus más de 700.000 seguidores de Instagram, Toñi procedió a eliminar todas las fotografías de su hija que había publicado en la citada red social. De momento ya no hay ni rastro de la pequeña Lola en sus redes y parece que no lo habrá durante mucho tiempo.
