La noche más dura y dolorosa de Lydia Lozano: una grúa tiene que mover a Charly
Según recoge Lecturas, “hablo con las cenizas de mi madre”. Lydia Lozano rompía a llorar. La periodista ha pasado uno de sus peores años. Tras el fallecimiento de su madre, era su marido, Charly, quien sufría un duro revés. Una bacteria hacía que tuviese que estar ingresado durante tres meses en un hospital. Lydia llegó a temer por su vida.
Ahora, ya en casa, todo cuesta mucho. Charly no siente las piernas y no puede moverse. “Para sentarle esta noche he tenido que alquilar una grúa y de la cama al sofá” explicaba en vísperas de la celebración de la Nochebuena. El arquitecto ha pasado tanto tiempo en el hospital que no puede moverse por sí solo. “Está empezando a ir a un sitio de rehabilitación y va a una clínica por las mañanas para que empiece a coger la musculatura”.
Lozano acudía a ‘El tiempo justo’ para explicar cómo había sido su año. Un 2025 lleno de momentos dolorosos y de miedos pero que ha logrado superar con fuerza. Poco a poco, todo va cogiendo su camino. Además, por suerte, su marido se recupera en casa del trance que ha vivido.
Habla con su madre
“No sé si esta noche voy a brindar con ella”. Lydia Lozano está enfadada con su madre. Esta fallecía hace pocos meses y dejaba a su hija desolada. "Hablo con las cenizas y no me mires así diciendo 'Está loca Lydia, la hemos perdido’”, le decía a Joaquín Prat, presentador del programa. La colaboradora habla con las cenizas de su madre y le pide que le ayude.
“Ahora que está arriba no reza, no me echa un cable”, aseguraba Lydia con su sentido del humor. ”Le digo 'Pero mamá, ¿qué haces ahí arriba? Habla con San Pedro que estás en zona VIP’”. Charly debía ser intervenido en el hospital y nadie imaginaba que la operación acabaría siendo una larga estancia de varios meses. Una bacteria ponía al marido de la presentadora en el peor de los trances. Su vida llegó a correr peligro.
“Charly es una persona muy divertida pero, insisto, esto de estar pegaditos tres meses es una prueba muy de fuego”, afirmaba. Lozano confesaba que en todos los años que llevan casados nunca habían pasado tanto tiempo juntos. La periodista no se ha despegado del lado de su marido en ningún momento.
“Charly ha sido maravilloso”, aseguraba entre lágrimas. Era Joaquín Prat quien consolaba a la periodista. “Al 2026 le pido que no vuelva una bacteria a nuestra vida, que no pisemos un quirófano en muchos años y que Charly ande. Que esta noche se cumpla el milagro de Lázaro y Charly vuelva a poder andar solito. O sea que voy a pedir mogollón”, continuaba.
“A mi madre ni te cuento lo que le voy a pedir esta noche. Con la copita de champán le voy a decir de todo a mi madre”, añadía. “A mi madre le diría que la echo muchísimo de menos. Además, era mi mejor amiga”.
