Crónica de un amor oculto y polémico: lo de Marta Gayá y Juan Carlos no fue un 'desliz'

Crónica de un amor oculto y polémico: lo de Marta Gayá y Juan Carlos no fue un 'desliz'
El Emérito mantuvo una relación sentimental de más de una década con la mallorquina, paralela a su matrimonio con Sofía, que comenzó en los años ochenta y evolucionó en amistad duradera.

Según recoge EsDiario, a pesar de lo que cuenta el Emérito en su libro de memorias, Reconciliación, lo cierto es que su vida extramatrimonial no se puede resumir en "dos deslices". Más allá de escarceos, en la vida sentimental de Juan Carlos I han habido, al menos, dos relaciones sentimentales importantes de forma paralela a su matrimonio con Sofía de Grecia: con Marta Gayá y con Corinna. A la segunda sí la nombra en el libro. A la primera no. Con ella mantuvo una historia de amor de más de una década siendo una de las mujeres más importantes de su vida. Desde hace años la relación ha mutado en relación de amistad.

Fue en junio de 1992 cuando los medios italianos la mencionaron abiertamente. Existía un trasfondo significativo. En los periódicos políticos se debatía la razón por la que no se relevaba a Francisco Fernández Ordóñez, titular de Justicia, que sufría un cáncer en fase terminal. En una comparecencia ante los periodistas, el presidente Felipe González explicó que no se realizaba el relevo ministerial porque el Rey estaba fuera de España.

'La dama del rumor'

El escándalo político estalló en ese momento. Se reveló que el monarca se hallaba en Suiza por asuntos privados. Esos asuntos privados tenían nombre femenino. El historiador Juan Balansó aludió a una “gaya dama” en El Mundo. Fue el reportero Juan Luis Galiacho en la revista Época quien identificó con nombre y fotografía a Marta Gayá‘La dama del rumor’ fue el encabezado del semanal.

Se conoció entonces que la presencia del rey en el país alpino era para apoyar a su compañera sentimental. La mujer originaria de Mallorca estaba profundamente conmocionada tras haber visto en directo el fallecimiento en un siniestro automovilístico de su amigo Rudy Bay, dueño de la aerolínea Spantax, y de su pareja Marta Girod. Juan Carlos deseó permanecer junto a ella.

Tras el revuelo, Juan Carlos I regresó a Madrid, rubricó los documentos que requerían su firma y partió de nuevo. Su ausencia fue especialmente notoria, pues coincidía con el aniversario del nacimiento de su padre, don Juan de Borbón y, afectado por un cáncer de laringe, era probable que fuera el último. La celebración de ese cumpleaños se llevó a cabo en la residencia de la Infanta Pilar. Hasta allí acudió sola la reina Sofía, quien apareció fotografiada con una expresión que reflejaba el menosprecio que estaba padeciendo.

Una relación de cuatro décadas

En realidad, el rey Juan Carlos jamás había sido reservado en su vínculo con la mallorquina. De hecho, tiempo después salió a la luz una anécdota reveladora. En julio de 1990, durante una cena en Mallorca con cerca de 200 invitados en homenaje al magnate Aga Khan, asistían los reyes de España. Ya casi al final del banquete, llegaron el escritor José Luis de Villalonga y Marta Gayá, junto al príncipe Tchokotua y su esposa, Marieta Salas. El Rey se incorporó y declaró: “Voy a saludar a mi novia”. No le preocupó la asistencia de la Reina ni de numerosas personalidades que propiciaron que la historia circulara rápidamente por el ‘todo Madrid’.

Su romance databa de inicios de los años ochenta. Marta, nacida en Mallorca en 1948, hija de Fernando Gayá, director general de Prebetong Baleares S.A. y dueño del hotel Villamil, ejercía como encargada de relaciones públicas en el Club de mar que dirigía Pepe Oliver.

Su historia sentimental con el Emérito fue resguardada y respaldada por la llamada corte de Mallorca, y el Emérito la simultaneó con otros affaires como el de Bárbara Rey. En 2007, Corinna Larsen detectó que había reanudado su romance con Marta y le obligó a cortarlo por completo. No obstante, más allá de lo afectivo, el lazo de amistad nunca se quebró y demostrará su lealtad hacia Juan Carlos de Borbón acudiendo a su 87 cumpleaños en Abu Dabi.